El Gobierno reacciona con una queja a los insultos de Venezuela
MADRID.Actualizado:El Gobierno ha trasladado a Venezuela su «profundo malestar». A eso se reduce de momento la respuesta del Ejecutivo de José Luis Rodríguez Zapatero al agravioso comunicado difundido por la embajada del país caribeño la pasada madrugada. En el texto se acusa al Ejecutivo socialista de «cobardía política» y a la prensa española de practicar el «terrorismo psicológico» y, de paso, se echa una cortina de humo sobre la solicitud de extradición del etarra Arturo Cubillas, acordada hace dos semanas por el Consejo de Ministros, y de la que el escrito no dice ni una coma.
A pesar de que la fiscal general de Venezuela, Luisa Ortega Díaz, afirmó el pasado martes que la petición no le ha sido comunicada formalmente, fuentes del Ministerio de Justicia confirmaron que ya ha sido cursada. Ahora bien admiten que ni ha habido respuesta ni la esperan pronto. Ya sucedió algo parecido cuando a finales de febrero el juez Eloy Velasco dictó una orden de busca y captura contra Cubillas. Nunca más se supo nada de ella.
La investigación abierta en la Audiencia Nacional sobre la supuesta participación de Cubillas en el adiestramiento conjunto de etarras y miembros de las FARC en la selva venezolana ha estado jalonada de agitados pronunciamientos por parte del Gobierno de Hugo Chávez y una absoluta falta de colaboración judicial y policial. Pero hasta ahora el Ejecutivo ha hecho oídos sordos a los exabruptos en pro de una buena relación diplomática. Esta vez, el vicepresidente primero, Alfredo Pérez Rubalcaba, tachó de «inaceptables e injustificables» los ataques verbales contra el Ejecutivo, pero no anunció ningún tipo de actuación adicional. «Queremos que la colaboración con Venezuela se mejore y se va a seguir trabajando para ello , pero eso no impide que cuando haya una posición pública que nos parece inaceptable e injustificable, lo digamos», añadió.