Un hombre resulta electrocutado pescando en el río Arillo

Cuando salió de su casa no imaginaba que no iba a volver. La plácida jornada de pesca que había planeado en un primer momento se convirtió en un trágico accidente que finalizó con su ingreso en la unidad de quemados del hospital sevillano Virgen del Rocío.

Era imposible que se pudiera imaginar que esa tarde iba a ser electrocutado por unos cables de alta tensión, mientras realizaba su actividad preferida en el río Arillo.

La pesca es una actividad en la que la paciencia es la mejor virtud y que no destaca por su riesgo al realizarse, sobre todo en una zona tan habitual y conocida como es el entorno del río Arillo.

Mala fortuna

Sin embargo, la mala fortuna hizo que en uno de los movimientos la caña tropezara precisamente con los cables de alta tensión que se encuentran en la zona, por lo que el pescador recibió una fuerte descarga que lo dejó herido de gravedad.

Los hechos ocurrieron en torno a la una y media de la tarde y hasta el lugar se desplazaron un buen número de efectivos de Policía Local, la Policía Nacional y Protección Civil, que habían sido alertados previamente por el 112.

Una vez que llegaron, junto a una de las salidas de las marismas, se intentó estabilizar al hombre que tuvo que ser trasladado en ambulancia hasta Puerto América.

Justo allí le esperaba un helicóptero del 061 para llevarlo con urgencia hasta el hospital sevillano y tratarlo en la unidad de quemados.

En un primer momento se pensó que se trataba de un accidente laboral, algo que se descartó cuando los servicios de emergencias llegaron al lugar de los hechos.