Ana Patricia Botín se afianza en el puente de mando del grupo Santander
La hija mayor de Emilio Botín deja la presidencia de Banesto para hacerse cargo de la filial británica del Santander
MADRID Actualizado: GuardarAna Patricia Botín O’Shea, la hija mayor de Emiilio Botín Ríos, presidente del Santander, se afianza en el puente de mando del primer grupo bancario español, con el encargo de dirigir la división británica, una de las apuestas más firmes de la entidad. La decisión se ha precipitado porque Antonio Horta Osorio, el profesional que desempeñaba esta función, ha fichado por la competencia, el Lloyds Bank, en el que desempeñará el puesto de consejero delegado a partir del 1 de marzo del próximo año.
Medios financieros interpretan que el nuevo papel de la primogénita confirma su condición de sucesora. Pero no será una cuestión de meses. En el Reino Unido hay mucho por hacer. La división británica es, después de Brasil, el segundo mercado extranjero para el banco. Entre los meses de enero y septiembre de este año proporcionó un beneficio de 1.533 millones de euros, equivalente al 18% de las ganancias del grupo, que duplica con creces el aportado por Banesto y crece a un continuado ritmo de dos dígitos. Se trata de un negocio muy apoyado en la banca comercial, en el que la experiencia acumulada en España resultará especialmente válida para la nueva responsable.
En realidad, Ana Patricia solo abandonó la cúpula del grupo durante un corto periodo de tiempo, el transcurrido entre el 22 de febrero de1999 y el 13 de febrero de 2002. En este último año fue nombrada presidente de Banesto y reforzó su presencia en el consejo del Santander, -un asiento que nunca perdió, dada la condición de su familia como accionista de referencia-, con su incorporación a la comisión delegada.
Aquel paréntesis se abrió en circunstancias especiales. En plena digestión de la fusión entre el Santander y el Central Hispano, la publicación de un reportaje a todo color en el que Ana Patricia Botín –consejera directora general de la entidad resultante, con responsabilidades en banca corporativa, tesorería y mercado de capitales- aparecía como la sucesora de su padre en el año 2007, suscitó recelos y una fuerte fricción entre los dos bancos en proceso de integración. Después de diez años de ejecutoria en el Santander, la directiva presentó la renuncia “para desarrollar nuevas iniciativas profesionales”, volcados en las nuevas tecnologías.
"Nadie me ha regalado nada"
Sus proyectos tuvieron desigual éxito, y Ana Patricia Botín volvió a la órbita del Santander Central Hispano cuando su padre prescindió de Ángel Corcóstegui con el abono de una multimillonaria indemnización. Nombrada para hacerse cargo de Banesto, marcó un hito al ser la primera presidente ejecutiva del sistema bancario español. Ocupaba este puesto cuando, en 2006, volvió a surgir el rumor de que podría dar el salto al Santander en fecha inmediata. Emilio Botín dejó claro que la sucesión iba para largo.
Casada con Guillermo Morenés y madre de tres hijos varones, la nueva directiva del Santander Reino Unido tiene 50 años recién cumplidos. Cursó estudios de Economía en las universidades norteamericanas Bryn Mawr y Harvard y con apenas 20 años fichó por la banca J P Morgan para trabajar en Madrid en las áreas de análisis y marketing, y posteriormente en Nueva York, donde aprendió a moverse en los mercados de capitales y tesorería. En 1986 le fue encomendada la responsabilidad de Latinoamérica, que devino su mejor escuela. “Nadie me ha regalado nada”, suele afirmar Ana Patricia Botín en referencia a esos años de aprendizaje. Por fin en 1991 recaló en el grupo bancario de la familia, si bien permaneció al margen de la ‘cocina’ de los procesos de fusión que constituyeron el núcleo del actual Santander.