La batalla del generaL

El general Risto Vidakovic afronta hoy el combate más importante desde que es el jefe de filas de un vestuario. El serbio cuenta casi todos sus guerreros para esta batalla. Sólo Álvaro Jurado faltará a lucha que los cadistas tienen pendiente contra el Écija.

La lucha está asegurada, y el destino ha querido que el entrenador del equipo amarillo se juegue su futuro ante el conjunto que le brindó la oportunidad de entrenar en solitario. Hasta entonces era un luchador de segunda línea, el escudero de Javier Clemente. Y con él pudo hasta combatir en batallas internacionales, cuando el de Barakaldo era el seleccionador serbio.

Luego en tierras sevillanas tuvo la oportunidad de combatir y ser el primero de la fila, hasta que su buen papel le dio la posibilidad de defender en solitario un escudo centenario.

Ahora su suerte depende de que derrote a un equipo al que seguro que le tiene un gran recuerdo, pero si quiere seguir defendiendo la coraza amarilla no tiene otra opción que vencer. Este partido es de esos en los que no importa cómo hacerlo. No es necesario dar espectáculo, el coliseum amarillo no tiene que disfrutar durante el transcurso de la batalla, simplemente debe irse con la satisfacción de que sus guerreros consiguieron ganar una batalla más del camino a la gloria.

Risto Vidakovic va con todo. El único que se cae de la lista de convocados es el sancionado Álvaro Jurado, los demás están citados con la mente puesta en la batalla. Todos deben ir pensando en cómo afrontar la lucha, pero sólo 16 serán los que se pongan la armadura cadista para buscar una victoria que temple los ánimos de los aficionados locales.

Se espera que Álvaro Campos siga siendo el guardameta que salga de la partida. El valenciano se ha ganado un puesto en el titular, pero no termina de transmitir la tranquilidad que necesita a sus compañeros de la zaga.

La defensa será la misma que la que perdió en Lepe, pero la convocatoria de todos los futbolistas hace que el míster se piense hasta última hora si hacer algún cambio o seguir confiando en los mismos. En cualquier caso la duda podría estar en la pareja de centrales, porque en cuanto a los laterales se refiere, serán Cifu y Diego Reyes quienes ocupen el flanco derecho e izquierdo respectivamente.

El dúo de soldados que tiene que frenar los ataques astigitanos serán el formado por el onubense Pedro Baquero y por Álvaro Silva. Aunque no sería descartable que el técnico probara por primera vez en la temporada con la pareja formada por Baquero y José Serrano. De este modo, el central sevillano jugaría en su perfil natural, ya que el onubense es zurdo y él hasta el momento sólo ha jugado en esa posición, acompañando a Silva que ocupaba la posición de central derecho.

Problemas defensivos

Aunque los problemas defensivos del equipo cadista no radican en los jugadores de la retaguardia. Más bien en los jugadores que juegan del centro del campo en adelante. El corte ofensivo de la mayoría de estos hombres hace que la retaguardia amarilla se vea resentida cuando los de Vidakovic pierden el balón. De hecho este ha sido uno de los temas más comentados por los futbolistas durante la semana, la presión de todas la líneas del equipo.

El primer futbolista del centro del campo será Wilfred Moke, que tendrá durante los dos siguientes encuentros la posibilidad de salir desde el inicio. El jugador franco-congoleño verá como la sanción de Álvaro Jurado le abre las puertas de la titularidad. Otro de los jugadores que podría actuar en su posición sería David González, pero el jugador asturiano juega habitualmente más adelantado, pero en los momentos que el técnico serbio ha necesitado tirar del ex del Málaga para que actuara en esa posición, el futbolista respondió a buen nivel. Por ello, se disputarán el puesto aunque parte con ventaja el ex del Écija. Y es que Moke es uno de esos guerreros de los que se monta en el caballo y aparece por todas las partes del campo de batalla. Justo lo que necesita el equipo cadista. Un jugador que no se complique la hora de sacar la pelota, pero que se implique en las labores defensivas.

Presión en ataque

La compañía de Moke en el centro del campo será muy importante. Y es que el míster quiere que la defensa del Cádiz comience en el jugador más adelantado, pero sin duda los más importantes deben ser los dos interiores. Aquí Carlos Caballero es el cerebro, la manija del reloj, el encargado de organizar el juego del Cádiz. Quien dirige al ejército amarillo dentro del campo. La estrategia debe pasar por sus botas y en las jugadas a balón parado será el que tenga que desequilibrar el partido del lado cadista.

Si Caballero es la manija, Fran Cortés es la balanza del juego del equipo de Vidakovic. Él será el que tenga que estar más cerca de Moke. Por él tiene que empezar el fútbol del Cádiz y deberá liberar a Carlos Caballero para que el madrileño sea el que suba con más asiduidad, pero sin que éste se olvide que tiene que volver, para que cuando el gaditano pueda, también se descuelgue y trate de jugar donde más peligro crea, cerca del área.

En las bandas estarán Aarón Bueno y Enrique. El catalán tiene que volver a recuperar el nivel que demostró en los primeros encuentros. Era entonces cuando la tropa cadista contaba sus batallas por victorias. Conquistaba todos los estadios que visitaba y era él quien siempre acertaba en perforar las líneas enemigas.

En la derecha volverá el extremeño. El de Azuaga jugará en su posición natural, donde mejor rendimiento saca a su fútbol, desde el flanco derecho donde desequilibra a la vez que crea peligro e incluso las diagonales que lanza son más peligrosas que el juego del '8' cuando actúa como delantero referencia. Precisamente este puesto lo volverá a ocupar Pachón. El ex del Rayo ya está a un buen nivel físico como para afrontar desde el inicio un choque importante. Además con jugadores como Enrique o Aarón en las bandas, la presencia en el equipo de un delantero centro nato es fundamental para que el juego del equipo funcione como el míster y los aficionados desean.