El acusado de asesinar a su mujer y dos hijos en Tarragona se entrega en Barcelona

Abdeslam Brada, presunto autor del asesinato de su mujer de 26 años y sus dos hijos, cuyos cuerpos fueron encontrados la semana pasada cubiertos de yeso y cemento dentro de la bañera en un piso de Tarragona, fue detenido ayer en la capital catalana. En un principio se sospechaba que había huido a Tánger.

El sospechoso fue detenido cuando paseaba de madrugada por Las Ramblas en estado de embriaguez. El individuo se paró ante dos agentes de la Guardia Municipal a los que advirtió que la Policía le estaba buscando. Los agentes le detuvieron tras confirmar que sobre él pesaba una orden de busca y captura. El hombre confesó a los dos policias ser el autor de la tragedia.

Según fuentes de la investigación, el principal sospechoso del triple asesinato se escapó de España hacia Bélgica. Abdeslam Brada salió del territorio nacional en un avión que cogió en un aeropuerto del País Vasco, aunque previamente estuvo en Sevilla, hacia donde pudo huir en primera instancia. A pesar de tener una orden de busca y captura, nadie en los tres aeropuertos por los que pasó cayó en la cuenta de que se trataba de uno de los supuestos delincuentes más buscados de Europa. En este caso el hecho de que tanto España como Bélgica sean Estados integrados en el espacio Schengen jugó a su favor. Por medio de este acuerdo de seguridad existe la libre circulación de personas, por lo que la policía no realiza controles físicos y, además, las líneas aéreas no están obligadas a presentar un listado de pasajeros, a menos que lo requiera la autoridad judicial.

Hacía dos o tres días que los Mossos le localizaron en Bélgica, gracias a los movimientos de su tarjeta de crédito, por lo que cursaron una orden de detención internacional. Sin embargo, por causas que al cierre de esta edición se desconocían, el fugitivo regresó a España. El miércoles llegó al aeropuerto barcelonés de El Prat y por la noche salió de copas, se emborrachó y poco después, hacia las dos de la mañana de ayer, fue detenido frente del gran teatro del Liceo. Trasladado a la comisaría de Reus, que es la que lleva el caso, se espera que hoy pase a disposición judicial.

El triple crimen, descubierto el 17 de octubre pero cometido varios días antes, conmocionó a Tarragona. Fue el fuerte olor que desprendían los cadáveres de la mujer y sus dos hijos de 2 y 6 años lo que alertó a los vecinos del inmueble que llamaron a la Policía. Los Mossos encontró los cuerpos de las tres víctimas cubiertos de cal, metidos en la bañera y en un avanzado estado de descomposición.

En tratamiento psiquiátrico, el presunto asesino ya no convivía con su pareja, ya que pesaba una orden de alejamiento desde 2009 por haber maltratado a su mujer en diversas ocasiones.