«Un pacto PSOE-PNV con vencedores y vencidos»
Rajoy acusa a Zapatero y a los nacionalistas vascos de actuar como un «sindicato de intereses particulares»
GRAN CANARIA.Actualizado:Mariano Rajoy dedicó ayer buena parte de su intervención en la clausura de la XVI Interparlamentaria del PP a reflexionar sobre el pacto presupuestario que el PSOE selló el viernes con PNV y Coalición Canaria y que, entre otros imponderables, aleja la posibilidad de un adelanto electoral, uno de los principales anhelos de los populares.
Rajoy planteó el acuerdo en término de vencedores y vencidos. Un análisis en el que Rodríguez Zapatero gana un año en la Moncloa y el PNV logra unas transferencias «más que discutibles» y «debilita» al Ejecutivo vasco de Patxi López. Zapatero, según el líder del PP, le ha mandado a López y a toda la ciudadanía vasca el mensaje de que «para los asuntos importantes» cuenta con el PNV antes de que con un presidente autonómico de su propio partido. La vitola de perdedores se la adjudica a los parados, pensionistas, funcionarios, pymes, autónomos, inversores. En definitiva, «a España».
Un hilo argumental que empleó al jefe del principal partido de la oposición para llegar a la conclusión de que socialistas y nacionalistas vascos han actuado, en esta ocasión, como «un sindicato de intereses particulares contra el interés general».
Rajoy vaticinó, no obstante, que el PNV acabará en la nómina de «engañados» de Zapatero. Y es que esta historia, a su juicio, cuenta con muchos elementos comunes con la negociación del 'Estatut' de Cataluña, durante la pasada legislatura en la que Zapatero «ninguneó» al entonces presidente socialista catalán, Pascual Maragall, y se decantó por Artur Mas para cerrar el contenido final del 'Estatut', aunque finalmente Zapatero «no respetó» lo convenido con Mas y varió el texto de la reforma estatutaria catalana durante la tramitación parlamentaria. «Algo que le puede pasar al señor del PNV», apostilló el dirigente popular en alusión a Iñigo Urkullu.
Rajoy, tal vez consciente de que desde las filas socialistas no tardarían en recordarle que José María Aznar llevó a cabo iniciativas similares durante su primer mandato, acotó que él era partidario de que un gobierno en minoría sacase adelante unos presupuestos pactando con otros grupos. Lo que lamenta es que «PNV y PSOE se han olvidado de la gente». Lo lógico, a su entender, hubiera sido que los nacionalistas vascos hubieran exigido al Gobierno que no congelase las pensiones como contraprestación para apoyar unas cuentas generales que definió como «el epitafio político». En este punto recordó al PNV que, al no hacerlo, deberá explicar a los pensionistas vascos por qué apoya la congelación de sus prestaciones. Rajoy ya considera al PNV «corresponsable» de que el presidente socialista pueda llevar a cabo durante un año más una política económica que «hace daño a la gente».
Mariano Rajoy, que el martes defenderá en el Congreso la enmienda a la totalidad que el PP ha presentado a los Presupuestos para el año próximo, puso el acento en que las previsiones económicas del Gobierno, más allá de los pactos para poder sacarlas adelante, «no reduce ni el gasto corriente ni el gasto social», pero sí congela las pensiones y mengua la inversión productiva a la par que sube los impuestos e incrementa los intereses que tiene que pagar España por su alto endeudamiento. «Este Presupuesto es el epitafio de la política económica de Zapatero», sentenció.
«Un país humillado»
Además de economía, Rajoy habló de política exterior. Se mostró convencido de que «para muchos ciudadanos es muy duro ver cómo a nuestro país se le humilla por la incompetencia de su Gobierno», en alusión a los últimos incidentes diplomáticos con Venezuela y la colonia británica de Gibraltar. Por ello se comprometió a que cuando sea presidente del Gobierno, España será «un país fuerte, respetado en el mundo y con una política exterior en defensa de nuestros intereses».
La Interparlamentaria también deja otros dos anuncios de Rajoy. El primero, que si vence en 2012 acometerá una nueva reforma laboral «para el empleo y no para el despido», principal defecto de la que ha sacado adelante el Gobierno con el apoyo de CiU «no genera empleo y solo sirve para abaratar el despido». El segundo reclamo es que José Manuel Soria, actual presidente del PP canario, será el candidato a presidente en las autonómicas de 2011. Rajoy debió reflexionar durante la ovación que le dedicaron los asistentes, porque añadió de forma inmediata: «Antes tendré que convencer al comité electoral nacional del partido, pero lo serás».