«Existe la posibilidad de que Venezuela juzgue a Arturo Cubillas»

¿Qué tiene ETA en Venezuela, su nueva retaguardia, una colonia de refugiados, campos de entrenamiento? ¿Qué?

En estos momentos estamos haciendo una investigación judicial. Nuestra posición es clara, firme y contundente. Ha viajado a Venezuela el director de la Policía y la Guardia Civil, y a través de esas informaciones determinaremos lo que hacemos. Siempre con la cooperación de Venezuela.

Llama la atención la cautela con que ha actuado el Gobierno ante las pruebas que han surgido de la presencia y actividad de ETA en Venezuela. ¿Por qué?

No tenemos que justificar a nadie, hemos actuado con absoluta claridad y firmeza y transparencia. Nos hemos apoyado en las declaraciones de unos etarras en un procedimiento judicial. A partir de ahí, es el juez quien decide y nosotros ejecutamos.

¿Y el Gobierno de Venezuela ha actuado con la misma transparencia?

No tenemos ninguna duda de lo que ha hecho el Gobierno de Venezuela: ha habido acuerdos entre la Policía de aquí y la de allí que están funcionando; el presidente Chávez ha condenado sin paliativos la actividad de ETA. Ya hay una investigación en marcha, y hemos pedido actuaciones concretas y contundentes contra Cubillas.

¿Qué entiende por actuaciones concretas y contundentes?

Medidas que tienen que ver con las decisiones del juez (orden de busca y captura). Y que se incremente si cabe la cooperación policial y judicial de Venezuela.

¿Está pensando en extradiciones?

Las tiene que pedir el juez y si las pide, les daremos curso.

En el caso de Cubillas es difícil porque es venezolano por matrimonio

Esa es otra cuestión. Se analizará el problema jurídico, pero siempre hay una alternativa. Es verdad que hay una cláusula que impide la extradición de nacionales, pero cada caso es un caso. Eso no quita que se pueda actuar.

¿Pudiera ser que la justicia venezolana fuera la que le juzgase?

Sí, está dentro de las posibilidades que no hay que descartar. Habrá que verlo en su momento. Son procedimientos judiciales y mecanismos de cooperación que están plasmados en los convenios.

¿El Gobierno tiene algún plan preparado si ETA deja definitivamente las armas y abandona la violencia? ¿Tiene un plan B?

No hay ningún plan B. Lo único que vale es el fin total y definitivo de la violencia. No cabe otra alternativa. ETA tiene que saber que sólo cabe eso, no hay ningún atajo, no hay otro camino.

¿Han pensado qué hacer cuando llegue ese día?

Nada. Tiene que llegar ese día y ese día llegará.

¿Y con respecto a los movimientos de la izquierda ‘abertzale’ a favor de las vías políticas, les dan credibilidad?

Batasuna es un partido ilegal y la izquierda ‘abertzale’ sabe que hasta que no haya separación, condena, desvinculación clara y tajante no hay nada que hacer. Tampoco hay ningún atajo. Ahí está el acuerdo suscrito entre PSOE y PP de modificar la ley electoral y la de partidos para recoger de la jurisprudencia del Tribunal Supremo y del Constitucional para que nadie pueda colarse en las instituciones, y no se han colado porque se ha actuado de forma vigilante y rigurosa por parte de la Fiscalía General del Estado y de los tribunales, y vamos a seguir haciéndolo. Con esta reforma se lleva a la ley lo que ya se había acuñado por la práctica judicial.

¿Cómo vive el Gobierno estos movimientos de ETA y la izquierda ‘abertzale’?

Con la esperanza de ganar. Lo vive con la responsabilidad de hacer todo el esfuerzo con todas las fuerzas políticas y de seguridad, con la esperanza de que lo que estamos haciendo va a acabar con la violencia.