LA ERA LORENZO
Actualizado:Comienza una nueva era. Hay que arrodillarse ante el nuevo rey del motociclismo. No es que me adelante a los acontecimientos, es que Motegi así lo ha decidido. Los amantes de las dos ruedas nos llevamos ayer un duro varapalo. El Mundial era un hervidero con la reacción tardía de Dani Pedrosa y el paso atrás de Lorenzo en el último Gran Premio. Motegi, esa laguna que el año que viene se disputará en abril, presagiaba lluvia, pero en el único día de sequía sólo patinó Dani Pedrosa.
El piloto catalán mordía la goma de Lorenzo en las últimas pruebas y ayer dejó el campeonato listo para sentencia. En la primera vuelta de los primeros entrenamientos libres, el de Repsol Honda se hizo añicos el hombre, y de paso sus sueños de alzarse en lo más alto del motociclismo mundial. Un fallo poco digno para un piloto como Pedrosa, pero, como humano que es, aunque a veces no lo parezca, besó el trazado nipón en el peor momento.
Ahora se abre el debate. Jorge Lorenzo ya se puede decir que es campeón virtual de MotoGp. La realidad va más allá, ya que el mallorquín se puede dar por triunfador y colocar en Motegi la definitiva bandera. Enésima esta temporada, con Pedrosa bajo mínimos y Rossi de testigo mudo de excepción para un año extraño. Una temporada que aún no ha concluido, pero que todos dan por finalizada. Un campeonato descafeinado para muchos, pero que, desde mi humilde opinión de simple aficionado, ha supuesto la primera piedra de un monopolio.
Las industrias Lorenzo han enseñado levemente su cara en los últimos meses. Si nadie lo evita, que no podrán, estaremos viviendo los próximos años una nueva era que superará la de la gallina vieja italiana. Con el permiso del maltrecho Pedrosa, este fin de semana será el principio del reinado de Jorge I.