¿Por qué se recomienda no tener hijos después de los cuarenta años?
Y ello, a pesar de que se goce de buena salud física y mental y de que los avances médicos lo permitan
MADRID Actualizado: GuardarEntre las múltiples recomendaciones que aporta la comunidad científica, parece generalizada la de no ser padres superada la barrera de los cuarenta años. Y ello, a pesar de que se goce de buena salud física y mental y de que los avances médicos lo permitan.
Las razones son claras. Una mujer nace con una población fija de ovocitos en sus ovarios y éstos se van gastando con el paso del tiempo. Desde el alumbramiento, cuando suele tener dos millones de ovocitos (algunas sólo nacen con un millón), a la pubertad, momento en que ya sólo contará con 400.000. Mueren, por tanto, 1.600.000. De esos 400.000 supervivientes, madurará uno en cada ciclo. Teniendo en cuenta que una mujer es fértil entre los 15 y los 50 años, arroja una cifra de 420.
«Cada ciclo elige una serie de ovocitos de los que solo madura uno de ellos, pero con el paso del tiempo la cantidad disminuye y van quedando los peores. Es como cuando tenemos una nevera llena y empezamos primero a consumir lo que más nos gusta, dejando para el final lo que no nos queda otro remedio que coger. Por eso, ya a partir de los35 años crece el riesgo de tener un niño con Síndrome de Down, lo que se incrementa pasados los cuarenta», explica Fernández-Tresguerres.
Los varones sin defectos en el semen no tienen ese problema. Funcionan con esperma fresco que se renueva en su aparato genital cada 72 días.