Villamartín dice adiós a su Feria de San Mateo con una gran afluencia de público

Con un ambiente por todo lo alto. Villamartín despidió ayer su tradicional Feria de San Mateo con la mayor afluencia de público desde que comenzara la celebración el pasado martes. El hecho de que concluyera la fiesta en sábado, en lugar de en domingo, dejó a muchos vecinos con la miel en los labios y con ganas de disfrutar de un día más de fiesta.

Desde primera hora de la tarde el Real de la Feria comenzó a llenarse de familias que disfrutaron, con los suyos, de una gran jornada festiva. El paseo de la Feria se llenó también de numerosos caballistas, muestra de la gran afición a los equinos que existe en esta localidad serrana. Tal fue la afluencia de públicos y caballos que en algunos momentos resultaba complicado pasear con absoluta tranquilidad.

Los jóvenes también tomaron el Real a primera hora de la tarde aunque su celebración se prolongaría hasta bien entrada la madrugada. Miles de vecinos de la comarca de la Sierra convirtieron el Real de la Feria y sus alrededores en el centro de la fiesta y la celebración serrana.

Fin de fiestas

En la Feria de San Mateo, como cada año, los vecinos de la Sierra volvieron a ser invadidos por la sensación que marca el final del verano y la llegada del otoño. Esta fiesta supone un paso más para concluir las numerosas celebraciones que se han llevado a cabo durante todo el verano en los 19 municipios de la comarca. No obstante, aún queda el broche de oro final que lo marcará la Feria de San Miguel que comienza el miércoles.