No me fío del colista

El se enfrenta esta noche al peor equipo de la Segunda División hasta el momento, o al menos eso dicen los números. Bueno pues, a pesar de dicha vitola circunstancial, la verdad es que temo más al Tenerife que a una vara verde. Desconfío totalmente de esos equipos que vienen entregando la categoría de favorito al Xerez. Dios me libre de los mansos que de los bravos ya me libro yo. Los insulares, actuales colistas, no han logrado puntuar en las cuatro jornadas de liga que llevamos. Eso los convierte en un animal malherido que hará todo lo posible por defenderse. Inexplicablemente este equipo diseñado para volver a la Primera división se está encontrando con bastantes problemas de adaptación a la categoría de plata. Y no es que anden cojos los tinerfeños. Melli, Pablo Sicilia, Juanlu, Natalio o Nino llevan un extenso bagaje en esto de darle patadas a un balón. Los de Alfredo Merino, técnico accidental, tratarán de cumplir el dicho de «a entrenador nuevo, victoria segura» esta noche en Chapín, aunque sólo hayan logrado llevarse los tres puntos del coliseo xerecista en una sola ocasión. La clave del partido estará en controlar bien los tiempos y saber jugar con la ansiedad del rival. Pero si el Tenerife llega motivado por el cambio de entrenador y la necesidad de puntos, más enchufados han de estar los pupilos de Javi López. El Xerez puede prolongar su buena racha de resultados venciendo hoy y acercarse aún más a los puestos de cabeza. La confianza adquirida por los buenos resultados ha de servir para que el equipo pueda refrendarse esta noche con una victoria, demostrando así que se ha encontrado el buen camino, quizás no el buen juego, pero al menos, el buen hacer. Si el equipo comienza a encontrarse a sí mismo y despliega el fútbol que hizo en la segunda mitad ante el Córdoba, el Tenerife deberá sudar sangre para doblegar a los azulinos y si a esto le sumamos el aliento de la grada, les será prácticamente imposible. Espero que así sea.