El PNV salva a Zapatero de tener que convocar elecciones anticipadas
El Gobierno y los nacionalistas vascos alcanzan un principio de acuerdo para sacar adelante los Presupuestos
MADRID. Actualizado: GuardarEl PNV ha salvado al presidente José Luis Rodríguez Zapatero de una casi segura convocatoria de elecciones anticipadas. El Ejecutivo y los nacionalistas vascos alcanzaron ayer, tras dos meses de negociaciones, un principio de acuerdo para sacar adelante los Presupuestos de 2011. Las negociaciones para que el PNV dé a Zapatero el apoyo presupuestario definitivo seguirán en las próximas semanas, pero el pacto de ayer es considerado fundamental y decisivo para que el acuerdo global termine en buen puerto.
El de los nacionalistas vascos era el único grupo con diputados suficientes, seis, ante el rechazo de la izquierda, el PP y CiU, para conformar una mayoría parlamentaria y salvar las cuentas públicas. Los propios socialistas habían reconocido que sin Presupuestos que garantizasen los recortes del gasto público a que Zapatero se ha comprometido con los mercados internacionales, y en una situación de manifiesta debilidad y soledad política del Gobierno, el anticipo electoral era la opción política más probable. El preacuerdo se ha logrado después de que el Ejecutivo de Zapatero aceptase traspasar a Euskadi las competencias en políticas activas de empleo, una demanda por la que los nacionalistas luchan desde hace 20 años, incluida la gestión de las bonificaciones empresariales para ciertos tipos de contrato. La competencia, que será ejercida a partir del próximo 1 de enero, queda valorada en 472 millones de euros anuales, un centenar de millones más de los que había logrado el 'lehendakari' socialista Patxi López pese a más de un año de negociaciones previas con el Ejecutivo.
Los socialistas, ante lo perentorio de su situación política, han tenido que buscar una fórmula para satisfacer la histórica demanda nacionalista sin romper la unidad estatal de la caja de la Seguridad Social, que era el problema que había paralizado la reivindicación durante tantos años.
El pacto satisface en su integridad la demanda del PNV, pues transfiere las funciones, bienes y el personal para ejercer las políticas activas de empleo, la intermediación laboral (INEM), la formación profesional y ocupacional, la inspección laboral, las actividades del Instituto Social de la Marina, y, en un futuro cercano, las funciones ejecutivas del Fondo de Garantía Salarial (FOGASA) al precio que ellos habían fijado.
El acuerdo es fruto de unas negociaciones iniciadas en julio en las que han participado los responsables en el Congreso de ambos partidos, José Antonio Alonso y Josu Erkoreka, los ministros José Blanco y Alfredo Pérez Rubalcaba, y que estuvieron diseñadas en conversaciones previas de Urkullu con Zapatero, quienes tuvieron su última charla ayer por la tarde para cerrar el pacto. El dato lo confirmó el propio presidente del PNV, ante la Puerta de los Leones del Congreso, cuando anunció el pacto y aseguró que los acuerdos son fruto de un momento en el que es necesario asegurar la estabilidad económica e institucional.
Comisión negociadora
El preacuerdo deberá ahora completarse con un pacto más amplio sobre aspectos bastantes más vinculados a los Presupuestos de 2011, que ya ha comenzado a negociar una comisión creada al efecto de ambos partidos. Sin embargo, es difícil que estas negociaciones finales, que aún pueden durar un mes más, se malogren porque la competencia pactada ayer era la reivindicación fundamental nacionalista para el acuerdo.
En las nueva fase negociadora, el PNV tratará de alegar más inversiones hacia el sector I+D+i, infraestructuras y en máquina herramienta para el País Vasco, así como el compromiso de traspaso de otras competencias de tipo socio-económico y un entendimiento para la «estabilidad política e institucional en Euskadi y en España» que Urkullu no concretó en qué consiste, pero que, una vez descartado el pacto de legislatura por parte del PNV, puede tener que ver con el respeto a la lista más votada en las próximas elecciones locales.
El preacuerdo se produce la víspera de que el Parlamento vasco viva el debate anual de Política General y dos días antes de que el Consejo de Ministros apruebe el anteproyecto de Presupuestos para 2011, que enviará la semana próxima al Congreso para su tramitación. También llega después de que el 'lehendakari' anunciase que el PSE asegurará la aprobación de las cuentas para el año próximo de las tres diputaciones forales del País Vasco, gobernadas por los nacionalistas, en minoría en Álava y Guipúzcoa.
El Gobierno negocia en la actualidad para ampliar el encarrilado pacto presupuestario entre PSOE-PNV con los dos diputados de Coalición Canaria y el de Unión del Pueblo Navarro. Si logra cerrar estos acuerdos obtendrá un respaldo seguro a las cuentas de 178 votos, dos apoyos por encima de la mayoría absoluta con la que tiene asegurada la aprobación del proyecto. Se trata de los mismos apoyos que respaldaron los Presupuestos en los dos ejercicios anteriores.