Reding se siente «fortalecida» tras la pugna con París por las expulsiones
BRUSELAS.Actualizado:Viviane Reding, la vicepresidenta de la Comisión Europea cuyas críticas por las expulsiones de gitanos de Francia provocaron la semana pasada la peor crisis entre París y Bruselas, no ha visto menguada su voluntad de hacer cumplir la ley en materia de derechos humanos. En una conferencia de prensa celebrada ayer en Estrasburgo, la vicepresidenta comunitaria dijo sentirse «fortalecida» tras la polémica. «Por lo visto -apuntó- cuando un hombre da un puñetazo sobre la mesa se le juzga viril, mientras que si es una mujer se la considera histérica».
Reding considera que se han realizado lecturas de sus declaraciones muy exageradas. «Lamento mucho que mis palabras hayan sido tergiversadas hasta el punto de que algunos hayan llegado a sentirse heridos. Probablemente ha sido así para no ir al fondo del asunto y perderse por las ramas. La responsable de Justicia, Derechos Fundamentales y Ciudadanía dijo mantener intactos sus propósitos de comprobar si las expulsiones de respetaban la normativa europea. En caso contrario, «alzaré la voz», expresó.
Ayer, en Luxemburgo, varios diputados exigieron explicaciones a un senador del partido de Nicolas Sarkozy, Philippe Marini, que hizo declaraciones contra el Gran Ducado que se consideran fuera de lugar. El presidente de la cámara luxemburguesa, Laurent Mosar, habló con el líder del Senado francés, Gérard Lacher, para transmitirle su exigencia de excusas a Marini. Lacher, y el primer ministro galo, François Fillon, le confirmaron no compartir lo dicho por el senador, quien indicó que «habría preferido que Napoleón III y Bismark hubieran llegado a otros acuerdos para que Luxemburgo no existiera».