El Tesoro coloca 7.000 millones de euros pero aumenta la tasa de interés por primera vez desde junio
La subasta se salda con un interés del 1,938% para las letras a un año y del 2,190% para las de 18 meses
MADRIDActualizado:El Tesoro ha adjudicado 5.279 millones de euros en letras a un año y 1.757 millones en letras a 18 meses, alcanzando así el objetivo de captación, aunque ha tenido que elevar el interés marginal de ambas denominaciones, algo que no ocurría desde el mes de junio. La subasta se ha saldado con un interés del 1,938% para las letras a un año y del 2,190% para las de 18 meses.
En la anterior subasta de letras a 12 y 18 meses, el Tesoro colocó con comodidad 5.515 millones de euros y rebajó el interés marginal en 35 puntos básicos en el caso de las letras a un año y en 25 para las de año y medio. El interés de las letras a un año se situó en la subasta celebrada en agosto en el 1,899% frente al 2,25% de la anterior operación, en tanto que el interés de las letras a dieciocho meses también se redujo hasta el 2,15% desde el 2,40% de la subasta precedente.
La puja española coincide con sendas subastas que se celebran hoy en Grecia, de letras a tres meses, y sobre todo en Irlanda, de bonos, sobre la que planea la sospecha de que podría tener que recurrir a la Unión Europea o al Fondo Monetario Internacional (FMI) en busca de ayuda.
Persisten las dudas
Después de que en abril la agencia de calificación crediticia Standard and Poor's bajara la calificación de la deuda a largo plazo de España hasta el nivel "AA", la deuda soberana española comenzó a ser objeto de la desconfianza sobre la evolución de la economía española a corto y medio plazo.
Posteriormente, a finales de mayo la agencia de medición de riesgos Fitch rebajó también la calificación de la deuda española, con lo que el Tesoro se encontró con dificultades crecientes para colocar sus emisiones y con lo que los intereses marginales se dispararon. El encarecimiento de la deuda reflejaba la desconfianza de los mercados frente a la deuda española y a su capacidad para afrontar los compromisos con sus acreedores.
Fuera del pelotón de cola
Sin embargo, en la segunda quincena de julio, la publicación de los test de resistencia a los que se sometieron las entidades financieras españolas insufló a los mercados la confianza perdida y, en todas las subastas celebradas desde entonces, tanto de bonos, letras y obligaciones, el interés se redujo.
La tercera gran agencia de medición de riesgos, Moody's, se limitaba a advertir en agosto de que la perspectiva de crecimiento de la economía española era "más débil" que la de otros países con la máxima calificación crediticia "Aaa", pero dejaba sin cambios la calificación de España.
En todas las subastas celebradas a partir de la segunda quincena de julio, tanto de letras, bonos y obligaciones, el Estado ha podido rebajar la rentabilidad ofrecida al tiempo que la demanda superaba con creces los importes ofrecidos.