Un patrimonio abandonado durante más de treinta años

Ubicado frente al Monasterio de la Victoria, aledaño a la estación de tren, el parque nació a raíz de la desamortización eclesiástica, fue reformado en 1861 y posteriormente en el siglo XX, con motivo de la construcción del instituto Pedro Muñoz Seca, cuando se perdió gran parte de la zona ajardinada. Está catalogado como jardín monumental y forma parte del conjunto histórico de El Puerto. Durante años acogió la Feria del Vino, que se celebraba en septiembre, pero hace unas tres décadas entró en decadencia. Ahora el Consistorio quiere recuperarlo.