Sirenas en Hispania
Yamamoto arrolló a un mecánico y el susto fue terrible cuando apareció la ambulancia, aunque la cosa no fue a mayores
MONZA.Actualizado:En el baile de ruedas por los garajes, todo preparado para que la parrilla al completo entrara a cambiar las gomas, una ambulancia encogió el corazón del entregado público italiano, con diferencia el más pasional y alegre del campeonato. No hubo imágenes del incidente en directo, preocupada la realización en no herir sensibilidades por lo que podía haber sido, pero luego, navegando por los videos caseros colgados en internet, se descubrió el misterio que tuvo a Hispania al borde de un ataque de nervios. El japonés Yamamoto arrolló literalmente a un mecánico, al encargado de la radio, y en un instante se temieron lo peor. La imagen fue escalofriante, pues el triste protagonista del día, despistado incomprensiblemente en un procedimiento que requiere la máxima atención, fue catapultado por los aires después de que la rueda trasera derecha del monoplaza le alcanzara como un toro enfurecido. Escalofriante.
El susto fue tremendo y adquirió tintes dramáticos al ver a la ambulancia en el garaje de Hispania como si de un bólido se tratase. En la camilla estaba el trabajador con un collarín, consciente en todo momento, y fue inmediatamente trasladado al centro hospitalario del circuito. Está bien, para la tranquilidad del personal, pero el incidente le salió cara a Hispania. Los comisarios deportivos de la carrera, encantados con su protagonismo y empeñados en justificar su sueldo, decidieron sancionar a la escudería después de detenerse en el artículo 23.1 por «salida poco segura». Pues eso, 20.000 dólares de multa por el atropello.
Órdenes en Red Bull
Mientras, en Red Bull siguen sin decantarse firmemente por la carne o el pescado. Sebastian Vettel, especialista últimamente en poner caritas de desaprobación, es el niño mimado en la casa de la fiesta, pero Mark Webber le ha tomado la medida al Mundial y aguanta el tipo en lo más alto. Ayer, sin embargo, solo pudo ser sexto después de una salida tan horrible como la de cualquier otro domingo, pero antes superó a su compañero como un ciclón por un inquietante problema de motor en el coche de Vettel que desapareció un giro después. Qué raro... Al final, la estrategia arriesgada de Vettel, quien apuró al máximo su cambio de neumáticos, le lanzó a la cuarta plaza. Entre los dos Red Bull, el Mercedes de Rosberg, que siempre va más rápido que el del oxidado Michael Schumacher.
Alguersuari, otra sanción. Nada, Jaime Alguersuari se aficiona a las sanciones. Por segunda vez, y de forma consecutiva, fue castigado por los comisarios con un paseo por la calle al entender los jueces que se saltó una variante para beneficio propio. «No entiendo el motivo del castigo. No he obtenido ningún beneficio al cortar la chicane. Es la segunda vez en dos carreras que acabo con uno», se lamentó el catalán. Fue decimoquinto, justo una plaza por detrás de Pedro Martínez de la Rosa.
Santander copa el podio
El Gran Premio Santander de Italia tuvo a tres patrocinados por el banco en la entrega de trofeos, que casualmente reproducían el logo de la entidad de un Emilio Botín esplendoroso. Estaba casi tan contento como Flavio Briatore, quien se paseó tan pancho por el paddock con la imponente Elisabetta Gregoraci, consciente de que era el centro de las miradas. Además, también se dejó ver el actor Hugh Grant, invitado de lujo en el territorio de Ferrari.