Algunos familiares de las víctimas se han acercado al lugar del siniestro. / Foto: Brígido
siniestralidad vial

Siete personas mueren en un choque frontal entre dos coches en una carretera local de Extremadura

Un menor de edad, único superviviente del gravísimo accidente, está ingresado en el Hospital comarcal de Mérida en estado grave aunque no se teme por su vida

MADRID Actualizado: Guardar
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Las carreteras de Extremadura han registrado un gravísimo accidente de tráfico a primera hora de la mañana de este sábado. Siete personas de las ocho que viajaban en dos coches han muerto en el acto tras un choque frontal en la EX-336, que une el municipio de Oliva de Mérida con Villagonzalo, en Badajoz. El único superviviente, un menor de edad, ha sido ingresado en el Hospital Comarcal de Mérida en estado grave aunque no se teme por su vida; presenta un traumatismo abdominal y fractura de fémur; está conciente y no ha tenido que ser entubado.

El siniestro se ha producido unos minutos antes de las 6.30 horas, cuando uno de los vehículos, un BMW en el que viajaban cuatro jóvenes, ha invadido el carril contrario chocando frontalmente con el otro coche. Algunas de las víctimas han salido despedidas, lo que hace pensar que no llevaban puesto el cinturón de seguridad; otras han tenido que ser excarceladas por los Bomberos al quedar atrapadas entre los amasijos en que han quedado reducidos los dos vehículos implicados. El BMW estaba ocupado por cuatro de los fallecidos -los hermanos Alberto y Jorge Carrosa Blanco, de 20 y 26 años, y las primas de 18 años Patricia Gómez Carrosa y María Nives Gómez Pozo, todos ellos vecinos de Oliva. El otro coche implicado en el que han perdido la vida otras tres personas es un Citroen C5 en el que viajaban un matrimonio, formado por Matías Béjar y María del Mar Sánchez, y su hijo de 14 años, los tres vecinos de Palomas, y otro adulto, Benigno Delgado, natural de Puebla de la Reina.

Familiares de las víctimas, testigos del accidente

Se da la circunstancia de que detrás del C5 viajaban algunos familiares que han sido testigos del choque y que son quienes han alertado al 112. Estas tres personas han sufrido crisis de ansiedad y también han sido trasladadas al centro hospitalario de Mérida. Hasta allí se han desplazado equipos de Cruz Roja y también al Instituto Anatómico Forense de Badajoz donde se realizará la autopsia a los fallecidos, para dar apoyo psicológico a las familias.

La delegada del Gobierno en Extremadura, Carmen Pereira, ha explicado que el BMV, que podría viajar a una velocidad inadecuada, invadió el carril contrario en un punto de la carretera con una curva descendente. El impacto de la colisión ha sido tan fuerte que se podían ver restos de los coches y de ropa en un olivar situado a unos 30 metros. Los ocupantes de este coche volvían a casa tras pasar la noche en las fiestas de un municipio cercano. Los del Citroen habían emprendido viaje media hora antes para acudir a una boda en Salamanca.

Esta tarde, seis forenses han realizado la autopsia a las víctimas del accidente y posteriormente, los cadáveres van a ser enviados a sus poblaciones de origen, Oliva (Ayuntamiento), Palomas (Casa de la Cultura) y Puebla de la Reina (Tanatorio), donde se instalarán las capillas ardientes.