Ciudadanos

Detienen a los tres encapuchados que robaron la recaudación de un bingo

Asaltaron a punta de navaja a dos empleados cuando iban a depositar el dinero en una sucursal bancaria de San Fernando

SAN FERNANDO. Actualizado: Guardar
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Una dura jornada laboral. Tras horas viendo cómo el azar jugaba con las personas que ponían su dinero y esperanza en unas bolitas, los empleados del bingo -que se encuentra ubicado dentro de las instalaciones del centro comercial El Plaza- no sabían que el destino les deparaba una desagradable sorpresa.

A las cuatro de la mañana y como es habitual, dos trabajadores salieron del emplazamiento para poner rumbo a una entidad bancaria cercana con la recaudación del día entre sus manos. Unos 2.000 euros que llevaban entre ambos con la inquietud de soltar tal responsabilidad cuanto antes y poder descansar. Se acercaron al buzón, habilitado para estos casos, y con sumo cuidado se dispusieron para desprenderse de la carga y de esta forma poder emprender el camino hacia sus casas.

Sin embargo, sus pasos estaban siendo estudiados por tres encapuchados que no dudaron en asaltarlos a punta de navaja. Una vez que comprobaron que no había ningún peligro que pudiera crear un sobresalto en sus intenciones, los tres atracadores rodearon a sus víctimas con las ideas muy claras y con un único objetivo: llevarse el dinero como fuera. Sabían que los cuchillos que portaban serían suficiente para amedrentar a esas dos personas que, ajenas a lo que estaba a punto de pasarles, andaban con tranquilidad.

Entre el susto, la inferioridad y el riesgo que suponía, los empleados no pusieron resistencia y el dinero cambió de manos fácilmente. Todo ocurrió en cuestión de minutos y sin apenas poder reaccionar, el instinto hizo aquello para lo que estaba preparado y entregaron la bolsa. Los atracadores huyeron rápidamente del lugar de los hechos respaldados por la oscuridad de la . El momento y el lugar oportuno. Todo bien estudiado para conseguir hacerse con un botín que ahora ya tenían para regocijo de los tres. En ese momento pensaban que no había nada que pudiera salir mal. Se sentían superiores por haber burlado el azar de las bolitas y haberse llevado un premio seguro. Aunque la suerte siempre es escurridiza y no les acompañó por mucho tiempo, como suele ser habitual. De la alegría y el subidón por la adrenalina pronto pasaron a la rabia y el disgusto. El tiempo justo en el que los empleados del comercio acudieron a la Policía Local para denunciar lo ocurrido y que los agentes comenzaran a seguir la pista de estos individuos que no dudaron ni un momento en amenazar a dos personas con varios cuchillos por conseguir dinero.

Estrechar el cerco

La misma mañana del atraco, que se produjo en la madrugada del martes, la Policía Local realizaba la primera detención y daba cerco a los autores del atraco, a pesar de que los empleados no pudieron dar muchos datos ya que iban encapuchados, era de noche y todo ocurrió con gran rapidez. Aún así, obtuvieron la información necesaria y una vez que certificaron su participación en los hechos, el supuesto ladrón pasó a la tutela de la Policía Nacional.

Los agentes le apretaron los tornillos, ya que no contaban con otros indicios para abrir vías de investigación, y tras someterlo a varios interrogatorios consiguieron reunir los datos suficientes para lograr atrapar a otro de los encapuchados. Poco a poco se iba cerrando el círculo y ya sólo quedaba uno para poder dar carpetazo al caso. Los testimonios del segundo detenido, junto a la descripción de lo ocurrido por el primero permitieron dar alcance al tercero.

Ayer la Policía Nacional conseguía atraparlo y tras descartar la participación de otras personas en los sucedido daba por terminadas las investigaciones.