Aguirre confiesa que esperaba que Neira dimitiera sin que hubiera que cesarle
La presidenta de la Comunidad asegura que no desaparecerá el Observatorio contra la Violencia de Género pero sí el consejo Asesor que preside el profesor
MADRID Actualizado: GuardarLa presidenta de Madrid, Esperanza Aguirre, ha confesado que tenía la convicción de que el profesor Jesús Neira iba a dimitir voluntariamente de su cargo de presidente del Consejo Asesor del Observatorio contra la violencia de Género sin necesidad de que tuviera que cesarle, como finalmente sucederá.
En rueda de prensa posterior al primer Comité de Dirección del PP de Madrid tras el periodo estival, Aguirre ha confirmado que el cese de Neira, que aprobará mañana el Consejo de Gobierno regional, no implica la desaparición del Observatorio contra la Violencia de Género de Madrid, que seguirá existiendo aunque gestionado por la consejería de Presidencia. "El Observatorio Contra la Violencia de Género es crucial en la Administración de la Comunidad de Madrid y mucho más en una autonomía como esta, que precisamente es la única presidida por una mujer", ha recalcado Aguirre.
Lo que sí desaparecerá del organigrama de la Comunidad, según ha informado, es el consejo Asesor del Observatorio, que hasta ahora preside Neira, porque es parte de la política "de economía de guerra" que según ha dicho lleva a cabo su Gobierno y que supondrá la desaparición de algunos organismos públicos, fruto de las "apreturas de cinturón" para frenar el gasto y combatir la crisis. Aguirre ha respondido a las críticas de Bibiana Aído sobre la desaparición del Consejo Asesor madrileño argumentando que la reacción de la ministra de Igualdad se produjo para evitar que le preguntaran "por el salario que percibe su pareja de los Fondos públicos de Andalucía".
Neira, «de héroe a villano»
La presidenta ha adelantado que el Gobierno regional no sustituirá a Neira en el puesto de presidente del consejo Asesor del Observatorio, al desaparecer este organismo como tal, y de nuevo ha afirmado que no le gusta "el fariseísmo" con que se está tratando al profesor "como si nadie hubiera contravenido nunca una norma de tráfico", ni tampoco que se le transforme "de héroe en villano tan rápidamente".
Ha indicado que decidió no cesar a Neira de manera "fulminante" cuando se conoció que había dado positivo en un control de alcoholemia porque no cree "que la reflexión sea mala" y porque debía ser el Consejo de Gobierno el que aprobara relevarle de ese cargo, a pesar de que su opinión es que "todos somos humanos y todos cometemos errores". Las infracciones de tráfico como la de Neira, según Aguirre, "no son asesinatos o robos" pero están penadas como faltas graves porque "ponen en peligro la vida de los demás" y por eso precisamente ha señalado que "deben llevar a la reflexión".