La entidad asegura que existieron presiones en el voto de los viñistas

La organización agraria COAG asegura que, durante el proceso electoral, algunos viñistas recibieron presiones por parte de las bodegas para volcar su voto al pacto de Fedejerez con Asaja. Así lo destaca Miguel Pérez, secretario provincial de la entidad. De este modo, concreta que «como las elecciones se han celebrado en plena vendimia, se amenazaba a los viticultores con no quedarse con la uva».

No obstante, la entidad se encuentra satisfecha con su trabajo, que se ha visto recompensado por el apoyo de los viñistas en el tramo de coalición de cooperativas. «Lo hemos tenido que llamar así porque la norma nos impide como organización agraria presentar candidaturas propias», resalta Pérez. Acto seguido, explica que «hemos tenido un resultado aplastante: la gran mayoría nos han dado su apoyo, así que creo que habría que invertir el rumor de que las movilizaciones las están llevando a cabo una minoría».

De hecho, la entidad confía en que con otra normativa, los resultado electores serían diferentes. Como sentencia Miguel Pérez, «hubiera habido un verdadero equilibrio de poder entre viñistas y bodegueros».

El secretario provincial sustenta sus palabras en la interpretación de los datos electorales no cooperativistas. Éstos se dividen en dos tramos: en menos de 20 hectáreas y en más de 20 hectáreas. Como declara Pérez, en el primero «hemos quedado prácticamente empatados», mientras que en el segundo «habría que descontarle a Asaja el número de votos que han aportado las bodegas». Para esta operación, recurre a las hectáreas totales que conquistó la organización, unas 3.500 de 4.681. No obstante, «si le restamos el voto de 12 firmas bodegueras, Asaja se queda en 500 votos», concluye el secretario provincial de COAG.

Como objetivo final, la entidad quiere resaltar su influencia entre un alto número de viñistas, que están dispuestos a movilizarse «por cambiar y mejorar este plan de viabilidad».