Moresco pone en duda a la Junta sobre la continuidad de la A-491

«Decir que las obras no se han paralizado es un insulto hacia el alcalde y los vecinos». Un día después de que el delegado provincial de Obras Públicas, Pablo Lorenzo, confirmara que las obras de desdoble de la A-491 se terminarían dentro de su plazo, el alcalde, Enrique Moresco, trasladó esta información a los residentes en el Camino Viejo de Rota y en la urbanización Bella Bahía.

El regidor popular se comprometió con los afectados a pedir a la Junta que elimine el talud de arena junto al bar Jamón, que se habilite un camino alternativo para el paso de bomberos y que se respeten las aceras en el paso inferior del puente. De hecho, éste será abierto al tránsito en unas tres semanas.

El anuncio de la polémica «reprogramación» de este proyecto dentro de los recortes presupuestarios de Obras Públicas y el posterior desmentido por parte de la consejera Rosa Aguilar de que esto vaya a suponer una paralización de los trabajos sigue dando coletazos. «Todos hemos podido comprobar en las últimas semanas que ha habido menos obreros y que incluso se han llegado a para los trabajos, lo llamen como lo llamen. Además sabemos que varias empresas portuenses han dejado de suministrar material a la constructora».

Así las cosas, el regidor consideró que de no ser por la presión ejercida desde el propio Ayuntamiento, el delegado provincial de Obras Públicas no habría visitado las obras con el objetivo de garantizar su continuidad. «Agradecemos el compromiso, pero además pedimos que los trabajos se ejecuten lo más rápido posible. Por eso vamos a estar muy pendientes de que esto sea realmente así. Han sido muchas contradicciones y ya no nos fiamos de lo que nos dicen».

Peligro de desprendimiento

Los vecinos de esta zona, que suman más de 800, denunciaron la inseguridad que padecen por el corte al tráfico del paso inferior del puente de acceso a la ciudad. Desde hace meses, se ven obligados a tomar por una estrecha calzada en la que a duras penas caben dos turismos. Por otro lado, se quejaron de la presencia de un talud de arena que presenta peligro de desprendimiento en el caso de que arrecien las lluvias.

Con todo, y ante la proximidad del inicio del curso escolar, el Consistorio se comprometió con los residentes a trasladar estas peticiones a Obras Públicas. El alcalde adelantó que el jefe de obras le informó durante la visita con el delegado Pablo Lorenzo de que el martes próximo concluirán el hormigonado del puente. «Entonces trasladarán todo el personal aquí para habilitar esta zona en un plazo de unas tres semanas. Estaremos muy vigilantes». En cuanto a los plazos de terminación, Lorenzo no concretó más allá de señalar finales de 2011 y principios de 2012.

Por otro lado, para compensar los problemas de tráfico, el primer edil se comprometió a que una pareja de la Policía Local regule el tránsito de vehículos tanto a la hora de salida por la mañana, como a la hora de llegada por la tarde, durante varias semanas hasta que se restablezca la normalidad en esta zona de las afueras de la ciudad.