El parque del Oeste amplía su espacio debido a la demanda de uso de los ciudadanos

Estuvo a punto de tener otra imagen. De que una gran estructura de hierro se asentara en uno de sus extremos y perdiera parte de un espacio que se ha consolidado como una de las alternativas de ocio más usada por los isleños. Los vecinos de la zona no dudaron entonces en movilizarse para evitar tal atropello y tras conseguirlo ahora ven como otra de sus demandas se cumplen.

Las obras para la ampliación del parque del Oeste están ya muy avanzadas e incluso hay quien aprovecha el nuevo sendero habilitado para pasear o hacer deporte, a pesar de que los trabajos no han terminado. En esta semana se han colocado los elementos de iluminación y en poco se comenzará con el asfaltado del camino así como el vallado del lugar para integrarlo dentro del parque. Son apenas unos metros, los que llegan hasta el desvío de la Ca-33 para el centro comercial de Bahía Sur, pero suficientes para las necesidades de un lugar que se estaba quedando pequeño.

Y es que, en San Fernando no sobran los espacios verdes y por ello cada metro es utilizado por los ciudadanos de forma intensa. El parque del Oeste es uno de los mejores ejemplos de la necesidad de que existan mayores espacios de ocio donde los pequeños puedan jugar mientras los mayores se distraen o hacen ejercicio.

«Es una gran idea porque la verdad que uno se sentía ya agobiado de ver lo mismo. Ahora tenemos un pequeño tramo más para correr y aunque es pequeño seguro que es muy utilizado», aseguró Blas Segura, asiduo a correr todas las mañanas por el recinto.

Aún así existen otras series de necesidades que los usuarios esperan que se resuelvan una vez se completen la actual reforma. «Los más pequeños no tienen nada con lo que distraerse. Falta columpios y toboganes y sobre todo sombra en el espacio habilitado para el juego infantil», argumentó Nerea Palacios, que suele ir a dar un paseo con su pequeña en el carro.

Las mesas puestas en el césped fueron la última mejora en cuanto a equipamientos del espacio. Han tenido muy buena acogida y ya se han quedado pequeñas. «Por la tarde hay familias que vienen con bocadillos y se quedan para cenar. La verdad que está muy bien pensado pero hacen falta más y otra serie de mejoras», aseguró Elena Medina. La apuesta municipal ya se ha concretado y los usuarios esperan que se complemente con otras actuaciones.