Igor Anton gana en Valdepeñas

Calor como el que acompaña a la caravana desde Sevilla, perfil quebrado y un final casi en vertical, con tramos de hasta el 27% en una cuesta de casi un kilómetro, son los aspectos más destacados que presenta la cuarta etapa de la Vuelta 2010, Málaga-Valdepeñas de Jaén (183,8 kms.).

En la durísima subida final están puestas todas las miradas de organización, corredores y aficionados, especialmente de los ciclistas que piensan en disputar la victoria, como ayer Philippe Gilbert, Purito Rodríguez o Igon Antón, los tres primeros en el Castillo de Gribalfaro.

Serán 900 metros con un rampa de 100 al 27% y tramos al 23% en estrechamiento que volverán a seleccionar un pelotón que ya ayer acabó con más de un ilustre descartado para la victoria final.

Antes, 40 kms. llanos de salida, 140 de recorrido quebrado y tres altos puntuables. Una cota de tercera, la de Montefrío (km.122) y otros dos de segunda, la de Zafarraya (km.56,5) y la de Valdepeñas de Jaén, que se encuentra a solo 7,8 metros de meta, lo que endurecerá aún más la temible subida final.