Detenido un joven por al menos ocho robos en diferentes fincas del Marco

La operación en la que la Policía Nacional detuvo la semana pasada a un joven como el presunto autor de un robo en una finca de Jerez, en el que se llevó ni más ni menos que 1.500 kilos de hierro, no estaba cerrada. Ayer dio a conocer nuevos e importantes avances en la misma. En primer lugar, otra detención, en este caso de un individuo de 23 años, A.S.F, que podría estar implicado en al menos ocho asaltos a diferentes fincas de distintos puntos del Marco de Jerez. En la misma actuación policial, los agentes también detuvieron a un menor, de 17 años y con antecedentes, como presunto autor de uno de los robos.

Las detenciones de estas personas están enmarcadas dentro de la que vino en denominarse como operación 'Maribel', que buscaba dar respuesta a los recientes robos que se venían produciendo en el Marco de Jerez, en concreto, en algunas barriadas rurales donde se asientan viñas y fincas rústicas, y en poblaciones como, por ejemplo, Trebujena y Rota.

Vehículo

Tal y como ocurrió en la primera de las detenciones por el robo en una finca ubicada en la carretera de El Calvario -la de los 1.500 kilos de hierro-, al joven de 23 años arrestado se le pudo intervenir asimismo el vehículo en el que se desplazaba hasta las viñas y fincas y con el que después transportaba los efectos que conseguía sustraer.

La Policía encontró en dicho vehículo numerosas herramientas industriales que son habituales en la comisión de este tipo de delitos, como fueron dos cizallas, dos tijeras grandes de podar, una palanqueta, una maza, un compresor, varias linternas, unos prismáticos y siete navajas.

La investigación policial ha podido determinar, hasta el momento, la presunta participación de este detenido en la comisión de al menos ocho delitos de robos con fuerza en las cosas en distintas viñas y fincas, donde, tras forzar candados y puertas de acceso, lograba sustraer gran cantidad de hierro, transformadores, baterías u otros efectos parecidos susceptibles de poder ser posteriormente vendidos.

Según apuntaban ayer fuentes vinculadas a la investigación, este joven solía vender en instalaciones industriales el material robado, que después era catalogado como chatarra. Lo habría hecho en al menos tres firmas diferentes.

Tal como se ha apuntado anteriormente, la misma operación policial determinó también la posible participación de un menor de edad en uno de los robos, motivo por el cual fue asimismo detenido y puesto a disposición de la Fiscalía de Menores de Jerez. En la actuación correspondiente, concretamente dentro de un registro domiciliario, los agentes intervinieron una escopeta de aire comprimido que presenta una manipulación -tiene recortada su culata- y numerosa munición útil del calibre 22.