Pegada y calidad en el once

La cuenta atrás está en marcha y las ideas deben estar claras a estas alturas de la película. A falta de un rival de entidad al que enfrentarse y tras el aplazamiento hasta el mes de septiembre del trofeo de La Vendimia, los jugadores de la primera plantilla del Xerez Club Deportivo disputaron ayer, con la ayuda de algunos canteranos, un partidillo en Chapín como continuidad de la puesta a punto que los azulinos están haciendo para el inminente debut en Liga ante el Cartagena en menos de siete días en lo que supondrá el retorno del Deportivo a Segunda.

El técnico catalán no tiene todavía la plantilla cerrada de forma definitiva -al menos tiene que llegar un central más-, pero parece que tiene claro el equipo que saltará al verde de Chapín el próximo sábado, tan sólo pendiente de algún puesto y la evolución de los lesionados.

Y es que las numerosas lesiones de distintos futbolistas que ha venido arrastrando el club desde el inicio de la pretemporada ha trastocado los planes del entrenador del Xerez, que tampoco ha podido contar con todos los efectivos desde el primer día de trabajo. Quizás es por ello, que muchos de los hombres que se han ejercitado desde los primeros compases hayan tenido algo de ventaja a la hora de que el entrenador decida el primer once de la temporada.

Ese es el caso de la portería, donde Chema va a recuperar el protagonismo que se ganó en el año del ascenso y que perdió la temporada pasada en Primera. Lledó todavía no ha podido demostrar muchas cosas, y lo cierto es que el único gol que el Xerez ha recibido esta pretemporada lo ha encajado, precisamente, el nuevo portero.

La línea defensiva, una de las zonas que más segura ha estado en los seis compromisos amistosos, es otra de las parcelas que el técnico catalán tiene claro. Como pareja de centrales actuaron ayer Gerard y Lombán logrando una gran consistencia en defensa, ayudados en los laterales por Raúl Llorente, en la izquierda, y por el canterano Joaqui, en la derecha. Una posición esta última que parece que tiene su lugar reservado para Edu Moya, que a partir del martes volverá a trabajar con el grupo con normalidad. Parece que tanto Juan Luis Redondo como Mendoza deberán trabajar duro para ganarse la confianza de López.

Seguridad y calidad

En cuanto al centro del campo, la calidad de los fichajes de Viqueira se dejó notar en el partidillo de ayer, sobre todo en aquellos que a puntan al once titular. Así, en el centro del campo, el entrenador del Xerez situó veteranía, calidad y fuerza. Vicente Moreno formó pareja en la medular con Rafa Barber. Tuvieron la ocasión de mover la bola con criterio y asistir tanto a las bandas como al jugador que actuó de enganche con la delantera.

Mejores sensaciones dejó Capdevila. El interior izquierdo se alió con Llorente para hacer de esa banda una gran labor y arrancar el aplauso en más de una ocasión de los cerca de 200 aficionados que se dieron cita en la grada baja de Preferencia.

Con menos protagonismo actuó Óscar Díaz, aunque también se le vieron buenas maneras. Por lo visto sobre el campo, de momento las bandas mejoran la calidad de temporadas anteriores, ya que Momo se borraba cada dos por tres y, Carlos Calvo, era muy irregular.

Ni que decir tiene que Capi tiene un puesto asegurado en la media punta. El sevillano demostró que llega en un muy buen momento de forma y junto con Bermejo en el ataque, y la ayuda de Capdevila se encargaron de desarbolar a los hipotéticos suplentes. Un once que ayer dejó muy buenas sensaciones y que demostró sobre el verde de Chapín, calidad, solidez, rapidez, veteranía y buen trato del balón, y lo mejor de todo, que vuelve a ilusionar a la afición xerecista.

Victoria para el once de gala de Javi López que no dejó de corregir a sus hombres por dos goles a uno, con tantos en la primera parte para Capi y Lombán. Antoñito, que pide a gritos paso en la titularidad, acortó distancias en la segunda mitad.