La línea férrea Córdoba-Málaga seguirá cortada hasta la próxima semana
Las dificultades de acceso a la zona afectada por la lluvia y la complejidad de los trabajos impiden reabrir el tramo mañana
SEVILLA. Actualizado: GuardarLa línea ferroviaria entre Córdoba y Málaga no se reabrirá mañana, como estaba previsto. Ante las dificultades de acceso a las zonas afectadas por las riadas del pasado lunes y la complejidad de los trabajos, que implican la reconstrucción completa de la vía en algunos puntos, habrá que esperar hasta la próxima semana, cuando los trabajos estén «más avanzados», para determinar la fecha aproximada de finalización de las obras, según informó ayer el Administrador de Infraestructuras Ferroviarias (ADIF).
Fuentes del ente dependiente del Ministerio de Fomento indicaron que, por el momento, se ha conseguido reparar unos 100 metros de vía entre los municipios cordobeses de Torrescabrera y Fernán Núñez, así como otro tramo de menor tamaño en el kilómetro 48,300 entre Montilla y Montemayor, en Córdoba, al ser las zonas que contaban con un acceso «más fácil» tras las fuertes lluvias registradas desde el martes en la zona.
Según afirmaron, los destrozos provocados por el agua han supuesto no solo que se haya movido o caído la vía, sino que en distintos casos se ha destrozado la superestructura y la plataforma sobre la que se establece. A esto se añade además la rotura del sistema de postes en algunos casos.
Reconstrucción
Así, permanece aún por reparar un tramo de entre 200 y 300 metros entre las localidades cordobesas de Montilla y Aguilar de la Frontera y otro ubicado en dirección Puente Genil, con destrozos salteados a lo largo del recorrido, que suponen la reconstrucción de nuevo de la vía de forma íntegra. Además, Adif ha advertido de que los materiales necesarios para su reconstrucción no pueden llegar por el momento a estas zonas, ya que los caminos de acceso se encuentran muy dañados, por lo que la reparación se está haciendo «muy complicada».
«El problema es que no solo ha existido inundación, con lo que tras la desaparición del agua las vías quedarían intactas, sino que se ha producido un importante arrastre de materiales con el temporal que ha movido las bases en las que se asienta la infraestructura ferroviaria», explicaron fuentes del Administrador de Infraestructuras Ferroviarias. Así, ante la previsión de un fin de semana «más tranquilo», los técnicos aprovecharán para llevar los materiales con el fin de que la vía pueda estar operativa en el plazo de tiempo «más corto posible».