La 'dieta' Cameron
Actualizado:El primer ministro conservador británico, David Cameron, con su escudero George Osborne en Hacienda, idearon y están aplicando un drástico plan de ajuste fiscal en el Reino Unido que el público, y lo acreditan encuestas varias, parece asumir como lógico e inaplazable cuando su gobierno cumple sus primeros cien días. Los resultados de mayo dieron a los minoritarios liberaldemócratas la posibilidad de formar gobierno con los laboristas, que llevaban 13 años al timón, pero el buen sentido de los británicos y su vieja tradición parlamentaria aconsejaban que administrara el más votado. También los liberaldemócratas lo entendieron juiciosamente así y negociaron una coalición de gobierno que hoy tiene el favor de la opinión. El líder liberaldemócrata, Nick Clegg, aplazó su principal demanda (un cambio en el sistema electoral, que los ciudadanos consultados al efecto decidirán en su momento) y comprendió que la salud financiera del Estado era la prioridad absoluta. Un déficit cercano al 13% del PIB en mayo y que debe bajar al 3% o menos al fin de la legislatura: tal es, en resumen, el programa que el gobierno diseñó y lleva a cabo. Es muy prosaico, pero es lo patriótico y lo inteligente a fin de cuentas.