La forma de agarre de los telones a las fachadas ya acarreó ciertos problemas en el momento de su disposición al principio de esta segunda temporada.
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Los toldos de la calle de La Plaza se mantendrán todo el año, aunque permanecerán recogidos

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El Ayuntamiento está buscando un nuevo sistema de sujeción para garantizar la estabilidad de los toldos que en verano se disponen en la calle de La Plaza, con idea de ofrecer algo de sombra durante el paseo o las compras de los ciudadanos. Hace algunas semanas, el fuerte temporal de levante hizo que una buena parte de las lonas se desprendieran, al romperse los sistemas de agarre que hasta ahora se han empleado, lo que condujo a su retirada por parte de personal de la brigada de Vías y Obras.

El responsable local de Infraestructuras, José María Martín Torres, ha dado cuenta de que el Ayuntamiento afronta gestiones con una empresa de San Fernando para encontrar una fórmula que evite que se repita el percance. La pretensión es que los telones puedan ser recogidos antes situaciones climatológicas adversas, idea a través de la que se ha llegado a un proyecto que contempla el mantenimiento de los toldos todo el año, aunque plegados en invierno y cuando la meteorología no lo permita. Martín Torres aporta como valor añadido el ahorro de los costes del montaje y desmontaje y la reducción de molestias para los vecinos.

Para la temporada actual se habían utilizado cables de acero y cuerdas elásticas de mayor grosor que las del año pasado. Sin embargo, estas se habían desgastado por su roce con los pretiles de las azoteas, que en palabras del edil, han actuado "como cuchillos" ante las severas rachas de aire. Martín Torres sumó como causas las que denomina como "especiales características" de la calle de La Plaza, que hacen que en caso de fuerte viento se produzca un efecto de "túnel", que hace difícil la estabilidad de los toldos.

Efectivos municipales ya han intervenido sobre las lonas, con la diferencia de que esta vez se colocan los pernos a la misma altura en las dos fachadas enfrentadas, para evitar el desnivel que se estaba generando por su disposición en los pretiles. Por lo pronto, se pretende que ahora el viento, en el caso de que de manera contundente, no lleve a que se repitan las escenas de hace unas fechas.