Una nueva etapa para los industrialistas
Alrededor de 40 aficionados dieron ayer la bienvenida a la plantilla británica
Actualizado:Cuesta vivir, pero más cuesta matarnos», comentaban ayer entre vítores los socios del Industrial. Más de 40 aficionados se reunían a las puertas del AC Hotel Chapín para recibir a la plantilla británica del equipo. Les aguardaba una espera de dos horas que, para ellos, no sólo auguraba el comienzo de un nuevo proyecto deportivo. También dejaba entrever la oportunidad de dejar atrás una época de su historia especialmente convulsa.
«Nos hemos sentido muy abandonados», explicaba Juan Mancilla, seguidor del equipo. «Hemos comido con las migas que les sobraban a todos los demás». Ahora las miras de la mayoría son muy diferentes. Se adentran en una nueva etapa con unos protagonistas «jóvenes, de entre 19 y 21 años, ilusionados, y que estarán totalmente dedicados al fútbol, en una categoría en la que los jugadores trabajan, como es Tercera División», recuerda el presidente, Juan Manuel Delgado.
El vocablo ilusión no sólo aparecía en referencia a la nueva plantilla del equipo. De hecho, era la palabra que aunaba a todas las opiniones presentes, incluyendo a las más escépticas. «Todavía no conocemos ni a los jugadores, pero tenemos que creer en algo. Viendo lo que vienen ofreciendo la Glenn Hoddle, ilusión no nos falta». La academia inglesa abastecerá de futbolistas al conjunto blanquiazul, mientras que el club, a cambio, les dotará de una superestructura donde ubicar su plantilla en formación. Según señaló Javier Igeño, miembro de la Glenn Hoddle que hace de enlace con la junta gestora, a la que también pertenece, «estamos ante una unión perfecta. El club se ha salvado, y deportivamente va a ser muy bueno, porque hay mucha calidad en el equipo».
En este nuevo proyecto habrá dos españoles, uno de ellos es Juanse Pelagajar, procedente de Jaén y también perteneciente a la academia. El lunes está prevista la llegada de ocho jugadores ingleses más, aunque Igeño asegura que tienen muy difícil optar a una plaza en el colectivo.
En cuanto a las deudas, la unión de ambas instituciones propone un plan de viabilidad de cuatro años, en el que prevén una especial dificultad para superar la primera temporada. «Si conseguimos pasar este año, el problema seguirá siendo grave pero será más fácil de llevar», asegura Igeño.
Comienza así una pretemporada plagada de novedades, pero que mantiene puntos de apoyo que ya funcionaron el año pasado, como la presencia de los futbolistas Curtley Williams y Pierre Hall. «Estos jugadores han demostrado ya un fuerte respeto por el club», avalan los seguidores.
El conjunto aficionado está dispuesto a encargarse de aderezar la apuesta. Lo hará con «entusiasmo, para que el club pueda volver a la época en la que llenaba el estadio Domecq, que es lo que se merece», asegura el socio Jeramo Rodríguez.