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Un inicio en busca de final feliz
El Sporting de Braga es el primer escollo del conjunto hispalense, que ya ha cerrado de un portazo el asunto Luis Fabiano El Sevilla se juega su pase a la 'Champions' ante un rival modesto pero incómodo
SEVILLA . Actualizado: GuardarEscribió el tristemente desaparecido ya José Saramago que Braga era un lugar idóneo para todo turista. «Es ese lugar donde el cielo se funde con la naturaleza», se atrevía a aventurar. El Sevilla, en su viaje a tierras lusas, espera que el premio Nobel tenga razón. Porque nada sería más paradisíaco para los andaluces que lograr el pase a la fase de grupos de la 'Champions'. Para alcanzar tal éxito deberá vencer hoy a un rival desconocido, poco temible en teoría. Pero es precisamente en el desconocimiento donde radica el mayor temor. Ironías de la vida. El Sporting de Braga es el típico equipo en Portugal que un año, de casualidad, logra quedar segundo, hunde los presupuestos millonarios de los grandes clubes y se convierte en el centro de todas las miradas.
Por ello el Sevilla no quiere problemas. De ahí que en dos días haya zanjado el tema de Luis Fabiano. «Se queda y punto». Así de tajante se mostró 'Monchi'. Porque al brasileño nada ni nadie puede distraerlo. Es pieza importante, o mejor dicho, clave. Quién mejor que el '9' de Brasil para guiar a un equipo que necesita golpear primero. Aunque no estará solo. Cigarini, el nuevo descubrimiento del director deportivo, aportará galones para que la vieja guardia vuelva a ganar a un equipo al que ya venció hace cuatro años en la UEFA.
Además, una victoria en la ida ante los portugueses significaría encarar con mayor eficiencia el encuentro de vuelta de la Supercopa de España en el Camp Nou. El otro reto. Aunque mucho más en segundo plano. ¿La razón? Algo más de 25 millones de euros tienen la culpa. Esa cifra es la que obtendría el Sevilla en el caso de continuar en la Liga de Campeones. Cuestión de billetes.
El nuevo camino en la máxima competición lo emprende el Sevilla en tierra santa. Portugal siempre fue terreno propicio para el equipo de Nervión. Sólo ha perdido una vez en sus ocho visitas. Buen dato. Pero precaución. Ya lo dijo el sabio luso, en 'El viaje del elefante': «Todo cielo tiene su Lucifer y todo paraíso su tentación». Braga podría ser el Paraíso terrenal sevillista, pero allí también hay pecados como el falso favoritismo. Tierra del norte donde los sueños se cumplen. Y el de Antonio Álvarez es llevar al Sevilla hasta el final.