«Si un piso está en unas cifras razonables se vende rápido»

Muchos podrían pensar que esta bajada hubiera influido en el cómputo del tiempo que se tarda ahora en vender un piso, factor que es tildado de «muy relativo» por los responsables de esta tarea en una de las dos oficinas que la empresa Inmohispania mantiene abiertas en Cádiz capital. «Si un piso está en un precio razonable, se vende rápido», aseguran sobre lo que se presenta como el quid de la cuestión. El personal de la inmobiliaria pone en cuarentena los precios barajados por los informes técnicos. Pero lo hace para revisarlos a la baja, y hablar de que «en Cádiz hay muchísimos pisos más baratos, e incluso muchísimas promociones».

En este sentido, el agente consultado, que asume que «ahora se tarda más en vender un piso», considera que el 5% de que se habla le parece «muy poco» respecto a las bajadas que él maneja en su día a día, y que le llevan a poner sobre la mesa descensos de 49 a 29 millones de las antiguas pesetas (aunque la media se sitúa alrededor de los 5), o rebajas de entre un 20 y un 30% en los precios establecidos. Otras entidades también radicadas en la capital hablan de que en enero ofertaban pisos por una media de 349.000 euros, mientras que a mediados de año lo hicieron por 316.934, en una sensible rebaja. En las zonas turísticas siguen produciéndose las mayores diferencias. En igualdad de condiciones de habitabilidad entre la playa y el centro urbano, el contraste puede estar entre los 200.000 y los 140.000 euros, respectivamente. Es, sin duda, una asignatura por aprobar.