Es noticia:
ABCABC de SevillaLa Voz de CádizCádiz
Sociedad

Científico de la moral bajo sospecha

Harvard investiga por mala praxis científica a Marc Hauser, un psicólogo experto en el estudio del origen y evolución de la mente

LUIS ALFONSO GÁMEZ
Actualizado:

La obra de Marc Hauser, autoridad mundial en la investigación sobre el origen de la moralidad, está bajo sospecha. 'The Boston Globe' reveló el lunes que la Universidad de Harvard, de la que es profesor, le investiga desde hace tres años por mala conducta científica y que, a consecuencia de esas pesquisas, la revista 'Cognition' va a retirar un artículo suyo de 2002 «porque los datos no respaldan los resultados». Además, la investigación ha arrojado dudas sobre otros dos trabajos publicados en 'Proceedings of the Royal Society B' y 'Science'.

Hauser ha centrado su carrera en el estudio de «las bases evolutivas y del desarrollo de la mente humana, con el objetivo específico de entender qué capacidades mentales son compartidas con otros primates no humanos y cuáles son exclusivamente humanas», explica él mismo en la web de su laboratorio de Harvard. En su libro 'Moral minds' (Mentes morales. 2006), defiende que, como producto de la evolución, el cerebro humano viene cableado de serie con una suerte de gramática moral universal.

Se ha hecho famoso por sus experimentos con monos tamarinos y rhesus en los que éstos demuestran capacidades mentales que se consideraban exclusivas de los humanos. Así, el ahora retirado artículo de 'Cognition' concluía que los monos tamarinos son capaces de asimilar patrones cómo hacen los niños cuando aprenden un lenguaje.

El alcance real de la investigación interna de Harvard, sobre cuyos resultados sólo ha trascendido lo dicho, es una incógnita. La universidad guarda silencio -ayer su oficina de prensa negó a este periódico hasta tener fotos de Hauser, a pesar de que es uno de sus investigadores más famosos- y lo mismo hace el científico. Sin embargo, en una carta dirigida recientemente a algunos colegas, admitía que se habían descubierto pruebas de mala praxis científica en su laboratorio, cuyo contestador tiene un mensaje que dice que él estará ausente hasta otoño de 2011.

«La impresión inicial es que las consecuencias de esta mala conducta serán restringidas y locales, y que no estamos ante un escándalo del tipo del del hombre de Piltdown, el orgón de Wilhem Reich o la fusión fría», augura el filósofo de la ciencia Eduardo Robredo Zugasti, autor del blog científico 'La Revolución Naturalista' (revolucionnaturalista.com). «Es importante que Harvard publique los resultados de la investigación porque, si no, no sabemos qué creer», ha declarado Herbert Terrace, especialista en cognición en primates de la Universidad de Columbia de Nueva York (Estados Unidos), a la revista 'New Scientist'.

Delimitar daños

La comunidad de los científicos cognitivos coincide en que urge que Harvard levante el secreto sobre los resultados de su investigación para delimitar los daños.

Algunos expertos, como Terrace, creen que hay ciertos estudios de Hauser y otros investigadores que se basan en grabaciones de vídeos del comportamiento animal que habría que poner en cuarentena porque es fácil que el científico vea la respuesta que quiere ver. Sea cual sea el resultado final, este caso demuestra, una vez más, que el sistema de publicación científica es el único que posibilita la detección de fraudes y errores al basarse en la experimentación y replicación, y no en la fe, testimonios o argumentos de autoridad.