La segunra era de los cuentachistes
'¡Al ataque! Chow' y 'El club del chiste' nos devuelven el pasado un formato donde el chiste es el protagonista
Actualizado:Los chistes vuelven a la carga. ¡Al ataqueerrr! Dos programas de televisión buscan dejar sin aliento al espectador, conseguir que se tronche de risa y no se despegue del sillón. Los cuentachistes se hacen hueco entre las series de ficción que predominan en la parrilla y las cadenas apuestan por un formato que hace años triunfó con ‘No te rías que es peor’ y ‘El semáforo’. Un formato que, según Paz Padilla, no ha cambiado: «Ahora recurrimos al humor porque, como hay crisis, la gente necesita reírse y desconectar un poco».
Estos espacios renacen con fuerza tras más de diez años de sequía. ‘Genio y figura’ fue uno de los primeros que emitió Antena 3 en 1994. «El templo del humor donde se rinde culto a los chistes», así presentaba Pepe Carrol el espectáculo. Muchos recuerdan los comienzos de Chiquito de la Calzada en este programa, donde se dio a conocer por su peculiar forma de hacer reír a la gente.
Las gracias de Paz Padilla tampoco pasaron desapercibidas en aquel espacio cómico. La descubrieron en Antena 3 y ahora Telecinco la tiene atada con ‘¡Al ataque! Chow’. Y no como concursante. Dieciséis años después, Paz Padilla se encuentra al otro lado: «Estoy buscando nuevos talentos, dando la misma oportunidad que me dieron Pepe Carrol o Bertín Osborne».
De enfermera a humorista, actriz y ahora, ‘showwoman’. La presentadora da pistas para ser un buen cómico: «Tienes que buscar tu personalidad y diferenciarte del resto». ‘¡Al ataque! Chow’ comenzó en febrero como un concurso para encontrar el mejor cuentachistes del país. Pero, este verano, las reglas han cambiado. ¡Fuera la competitividad! Ahora Paz Padilla tiene a seis famosos ‘en su poder’, entre ellos, su antigua compañera en ‘Genio y figura’, Pilar Sánchez. Tres hombres y tres mujeres que no paran de contar chistes en cadena. Mientras uno está de pie, los demás se ríen y hacen muecas desde los sofás blancos.
Para darles un descanso en plató, un equipo de ‘¡Al ataque! Chow’ saca la cámara por las playas de España y busca al mejor chistólogo anónimo, en una sucesión de chistes, no siempre buenos, sobre un escenario arenoso. También realizan pequeños espacios en los que podemos ver a la presentadora haciendo parodias, por ejemplo, de ‘El juego de tu vida’.
En el nacimiento del programa hubo un invitado especial. Paz Padilla ya no recuerda lo que era ser concursante, pero sí sintió nostalgia cuando llegó Chiquito de la Calzada a ‘¡Al ataque!’: «Pensé: ‘¡Madre mía, cómo cambia la vida!’».
Todo un arte
Los monólogos también alcanzaron su esplendor con ‘El club de la comedia’, producto neoyorquino traído a España en 1999 y que retransmitía el ambiente divertido de los teatros donde los monologuistas creaban risas. Algunos de ellos venían con guión. Quitando a los humoristas invitados y los noveles, los demás interpretaban las historias que creaban guionistas como Pablo Motos y Luis Piedrahita, entre otros.
Seis temporadas duró el programa. Y ahora Anabel Alonso toma las riendas de ‘El club del chiste’ en Antena 3, y eso que no tiene buen trato con los chistes: «A veces no es tanto qué se cuenta sino cómo se cuenta. Ese es todo un arte que dejo a los profesionales». Sin embargo, se siente muy bien con su personaje, porque tiene «más mala leche», confiesa la actriz.
El escenario del local, que recuerda a los teatros de ‘El club de la comedia’, pretende sumergir al telespectador en ese ambiente de la ‘stand-up comedy’ donde los monologuistas se enfrentan solos al público. Aunque, aquí, los cómicos deben lograr la risa en un tiempo exprés.
Anabel se convierte así en la directora de un quinteto de artistas que canta a carcajadas. Meritxell Huertas con su profesionalidad, la modelo Martina Klein con su audacia, David Amor con su atractivo, Leo Harlem con su veteranía y el joven Diego Arjona con su talento recién descubierto.
Sobre las tablas se turnan para contar sus chistes, rodeados de espectadores que llenan el local. Y en el ‘backstage’, donde nadie podría saber lo que hacen, no se ocultan. El telespectador es testigo de pequeñas historias que muestran las relaciones entre ellos.
El programa también tiene su parte VIP. Aquí es donde Martina Klein busca y captura a famosos para que, sin guión previo, cuenten una gracia. Manuel Fraga ya ha contado uno con tono picantón.
Pero, ¿por qué los chistes? ¿Por qué ahora? Daniel Écija, presidente ejecutivo de Globomedia, tiene sus razones. El chiste en España es «costumbrista y localista», pero «sigue siendo algo contemporáneo y fresco, por lo que intentaremos que el programa y nuestros chistes huelan a siglo XXI».