Un aparatoso incendio calcina un trasformador eléctrico en Puerto Real
El viento de levante dificultó las labores de extinción del fuego, que provocó una columna de humo visible en toda la Bahía de Cádiz
CÁDIZ. Actualizado: GuardarLa nube de humo gris se podía ver a varias decenas de kilómetros a la redonda. Una subestación eléctrica era pasto de un aparatoso incendio, al salir ardiendo uno de los diversos transformadores que abastecen de suministro eléctrico a buena parte de las localidades de la Bahía, que sufrieron pequeños cortes de varios minutos a lo largo de la mañana.
La subestación eléctrica de Puerto Real está situada junto al hospital universitario de la localidad, en el kilómetro 661 de la autovía A-4, en una zona de pastos que afortunadamente no sufrió los estragos de las llamas.
El fuego comenzó alrededor de las 12.00 horas del mediodía, aunque la compañía Endesa descartó que las causas se deban a una sobrecarga en la demanda de electricidad, ya que a esa hora -según fuentes de la compañía- ni siquiera se había registrado puntas de consumo, habituales del verano por el mayor uso de sistemas aires acondicionados. En todo caso, la compañía aún no ha explicado cuáles pudieron ser las causas que originaron las llamas, a la espera de que la investigación.
Las llamas tampoco causaron heridos, a pesar de que a esa hora varias decenas de operarios trabajaban en la subestación. Lo más grave, por tanto, fueron los daños que sufrió el convertidor incendiado, en el que se llegaron a producir diversas explosiones, peligrosas especialmente para los bomberos que acudieron a extinguir el siniestro. En estas deflagraciones salieron despedidas, además, materiales aislantes de porcelana.
Deflagraciones
Curiosamente, según explicaron fuentes del Consorcio Provincial de Bomberos, estas deflagraciones ayudaron a rebajar la intensidad de las llamas, en lugar de avivarlas. Aunque los bomberos se tuvieron que enfrentar a no pocas dificultades, que dificultaron su trabajo, como el aceite que se desprendía de la máquina o el fuerte viento de levante, que hizo llegar algunos rescoldos a unas palmeras de hasta 15 metros que se encuentran plantadas en la subestación, y que se convirtieron en un segundo foco donde actuar.
El transformador, de siete metros de altura y 50 metros cuadrados de superficie, se encontraba protegido por dos muros laterales que evitaron que las llamas afectasen a otros convertidores cercanos que sí funcionaban a pleno rendimiento. Para no provocar un cortocircuito, los bomberos utilizaron en un principio 450 litros de espuma, con la que apagaron las llamas. Aunque luego, emplearon 12.000 litros de agua para refrescar la zona. Hasta que quedó controlado el fuego, se emplearon tres horas y el trabajo de una dotación total de seis bomberos de los parques de Puerto Real y Cádiz, con cinco vehículos.
Cortes del luz
Endesa, compañía responsable del transformador incendiado, explicaba ayer que el accidente no había causado apagones graves en la Bahía, y que «ningún cliente sufrió cortes del suministro», aunque en algunas localidades como El Puerto, Cádiz o Jerez sí se percibieron bajadas de tensión y «microcortes» de pocos minutos, que la compañía achaca al cambio automático de un transformador a otro.
Curiosamente, Puerto Real, donde se produjo la avería, fue la localidad donde menos se notó, ya que según la empresa municipal de servicio eléctrico (Epresa), la localidad utiliza otros convertidores de la misma planta.