El pinchazo del empleo en EEUU hunde a la Bolsa

La indefinición ha reinado en los mercados bursátiles toda jornada hasta que se ha conocido el paro en EEUU. Se esperaba una mejoría pero no ha llegado porque la tasa de desempleo se mantiene en el 9,5%, pese a que en julio se destruyeron 131.000 empleos. Este dato ha forzado a una apertura en rojo de Wall Street (-0,78%), que a su vez ha arrastrado al Ibex-35. Ha pasado de subir un 0,19% a perder cerca de un 2%. El selectivo, que en los últimos días llegó a coquetear con los 11.000, cae hasta los 10.600 puntos.

El mercado español se ha dejado un 1,74%, equivalente a 188,90 puntos, para colocarse en las 10.651 unidades. Pese a este cierre en negativo de la sesión, la semana termina en verde (+1,44%), y es la tercera consecutiva. Las pérdidas anuales aumentan hasta el 10,79%.

En Europa, con el euro a 1,329 dólares, el índice Euro Stoxx 50 bajaba el 1,6%; París, el 1,45%; Fráncfort, el 1,2%; Milán, el 1,1%, y Londres, el 0,85%. Por su parte, la Bolsa de Nueva York recuperó hoy vigor a medida que se acercaba el cierre y el Dow Jones de Industriales cedió el 0,2% al final de la jornada.

El cierre neutro de Wall Street el jueves y el buen comienzo de la sesión en Europa favorecieron las ganancias de la Bolsa española desde el inicio de la sesión, que transcurría sin grandes oscilaciones, entre el nivel de 10.900 puntos y el precio de cierre de la víspera, expectante por conocer los datos del paro estadounidenses del mes pasado.

200 puntos menos de golpe

Entre medias, se publicaban algunas noticias favorables para el mercado, como las ganancias del Royal Bank of Scotland y el crecimiento del 0,2% de la economía española en el segundo trimestre. La destrucción de 131.000 puestos de trabajo el mes pasado en Estados Unidos, aunque la tasa de paro se mantuvo en el 9,5%, acabó con las pequeñas ganancias de la Bolsa, que bajó de 10.850 a 10.630 puntos de golpe. Además, favoreció la revalorización del euro, que subía de 1,317 a 1,333 dólares y las compras en el mercado de deuda.

Los inversores se lanzaron a recoger beneficios al no tener en cuenta que el dato de paro estuvo condicionado por la conclusión de contratos laborales para confeccionar el censo estadounidense y que en el sector privado se crearon 71.000 puestos de trabajo. La apertura a la baja de Wall Street, el aumento de sus pérdidas -al cierre bajaba más del 1%-, y la imposibilidad de la Bolsa española de mantener el nivel de 10.700 puntos causaron la mayor caída del mercado desde finales de junio.

Todos los grandes valores han bajado: Banco Santander caía el 2,6%; BBVA, el 2,01%; Repsol, el 1,72%; Iberdrola, el 1,57%, y Telefónica, el 1,1%. La mayor caída del Ibex correspondía a Telecinco, el 3,86%, seguida de Sacyr, con un retroceso del 3,08%, mientras que Abengoa bajaba el 2,95%, y Enagás, el 2,74%. La única empresa del Ibex con ganancias ha sido Acerinox, que subía el 0,3%, mientras que Gamesa registraba el menor descenso, el 0,37%.

En el mercado continuo ha destacado la caída del 6,99% de Barón de Ley, seguida de Prisa, que cedía el 5,71%, mientras que Inypsa comandaba las subidas con un alza del 4,89%. En el mercado de deuda, la rentabilidad del bono español a largo plazo bajaba siete centésimas, hasta el 4,04%, mientras que el diferencial con la deuda germana bajaba a 1,53 puntos. El efectivo negociado en el mercado nacional ascendía a 3.057 millones, de los que 1.250 millones los intermediaron inversores institucionales.