Cinco talentos en un altar
El espacio expositivo de la Iglesia de San José de Puerto Real despliega el relicario colectivo de la muestra 'Miradas'
PUERTO REAL.Actualizado:El arte juega a las cuatro esquinas en la Iglesia de San José. En cada una de ellas, y en su centro, la exposición 'Miradas' despliega un prodigio de técnicas en fotografía, pintura y cerámica, brotadas de cinco mentes y diez manos de mujer. El antiguo altar se convierte en frontispicio, con una obra de cada artista. Todas destilan una personalidad artística madura, digna de creadoras ya asentadas.
«Una obra con cuerpo de mujer, a la que alude con leves pinceladas, con miradas que buscan la complicidad, cara a cara». Esa invitación la detecta Rosario López en Lola Cepeda, quien echa mano de una técnica mixta para representar un universo predominantemente femenino, con todas sus aristas.
Las sumisas gheisas lo mismo acarician que demuestran su poder. Del aspecto coqueto y cortesano de sus 'meninas', al futuro, representado por unas niñas y jóvenes, en las que reinan el rojo y el azul.
«En el silencio de su figura en pie, los lodos se funden entre los dedos, de cada lance obtiene líneas puras, elegidas desde el otro lado de la piel». Así describe Antonio Paso la creación de Lola Gómez-Gil.
En ella hay ecos andalusíes, esculpidos en su 'Espera de la Alhambra', y susurros de la mar, como en su colección de 'Torres del mar', atalayas que simbolizan a la 'Luz', los 'Reflejos' y los propios 'Faros'. «Quien no pudo conocer Tartessos y su esplendor, que no sufra, hay quien recuerda por los demás». Así presenta Pedro Corpa la cerámica de Manuela del Cerro.
Así los combina en su serie de 'Atrapavientos', molinos inmóviles y al mismo tiempo dinámicos. La metáfora del 'parir' artístico queda plasmada en su instalación 'Boceto de cuna'. Figurados cartones, nidos y huevos rodean a la sobreelevada 'Cuna de germen'.
«La poesía de los rincones más diversos; la contemplación de lo pequeño, de belleza para muchos inadvertida; la admiración por el detalle y la fugacidad del instante», esas son las insinuaciones que Juan Antonio Castro observa en 'Be calm', la exaltación al sosiego que compone Noelia Antúnez.
Ella mezcla los acetatos con un elemento que nos convierte en observadores todavía más conscientes: el alambre que teje un enrejado que se dispone entre nuestra contemplación y el objeto.
«Belleza serena, laboriosa sencillez y sensual ternura, en una síntesis de lo maravilloso y lo cotidiano, al presenciar un acontecimiento mágico». Esos son los ingredientes que desgrana Emilio Alegre en la riqueza puntillista de Inma Ruiz. En los fondos de sus cartones serigrafiados se pueden reconocer 'trazas' de pan de oro y plata, de pastel, de acrílico y hasta de recortes de periódico repletos de noticias.
Esta exposición conjunta puede visitarse de lunes a viernes hasta el próximo 31 de julio. La entrada es gratuita.