Denuncia «impagos» de la asociación de comerciantes

El empresario local Manuel Jesús Estudillo ha denunciado el impago por parte de la asociación puertorrealeña de comerciantes Apreco de los dos últimos meses de alquiler de un local de su propiedad, en el que la patronal ha mantenido hasta hace días su sede.

El afectado recuerda que firmó un contrato por cinco años con la junta directiva anterior, y que con ello ha perdido a otros clientes. «En ese tiempo yo no puedo usar el local, pero ellos tampoco pueden dejar de pagar», contrapone.

Estudillo alude una reunión en la que Apreco le propuso una rebaja del 40% que aceptó, aunque finalmente los comerciantes retiraron su oferta inicial.

Desde la semana pasada un cartel indica el traslado a unas nuevas dependencias. Los comerciantes afirman que se mudan por las «condiciones» del local, y explican que «con los dos meses de fianza se compensará la deuda».

Apreco encargó a un técnico una inspección, en la que afirma detectar hasta doce deficiencias «significativas». Una de ellas es objeto de polémica, ya que mientras el perito habla de falta de agua potable, el propietario replica que no podían darla de alta porque, según su versión, «la asociación no tenía licencia de apertura».