Griñán pierde en el pulso con el BdE
Actualizado: GuardarLa marcha de CajaSur deja tocado políticamente a Griñán, para regocijo lógico de su principal adversario, Javier Arenas. Los dos han defendido lo mismo, incluso lo pactaron: CajaSur para una andaluza y luego la fusión de la sevillana con la malagueña. Pero qué duda cabe que quien más arriesga, más pierde. Y Griñán lo arriesgó todo. Si durante meses se mantuvo en la retaguardia y no quiso decir palabra sobre lo que se movía en las cajas, en las últimas semanas el presidente andaluz salió al frente para colocarse en primera línea. Durante este tiempo todas sus declaraciones y gestos han estado medidos y han significado un cierto pulso al Banco de España, con cuyo gobernador, Miguel Ángel Fernández Ordóñez, aseguran algunas fuentes que no hay mucho 'feeling'.
El pulso ha sido tenso. Hay quien interpreta que cuando Griñán advirtió de que la Junta tiene la última palabra sobre el sip de Granada, en realidad era un mensaje al Banco de España sobre el asunto CajaSur. El presidente está bastante decepcionado sobre la actuación del Banco de España en todo el proceso de CajaSur, sobre todo al permitir que fracasara la fusión practicamente hecha con Unicaja. Devolverle a ésta la cordobesa era en cierto modo un asunto de justicia. Ayer llegó a decir que CajaSur dejó de ser andaluza cuando renunció a la fusión con Unicaja y se puso en manos del Banco de España. Expresaba con ello hasta qué punto le ha descorazonado la resolución del proceso.