Los partidos catalanes no logran unirse en la defensa del 'Estatut'

PSC, CiU, ERC e ICV coinciden en su rechazo a la sentencia del Constitucional, pero son incapaces de consensuar una resolución unitaria contra el fallo. La consigna era no repetir el «ridículo» de la negociación de los preparativos de la manifestación del sábado pasado; «no hay que repetir el espectáculo de la semana pasada», dijo Artur Mas, pero ni así. Los líderes de las cuatro formaciones, José Montilla (PSC), Artur Mas (CiU), Joan Puigcercós (ERC) y Joan Herrera (ICV) se reunieron ayer para pactar una resolución unitaria de mínimos en el 'Parlament' para presentarla en el pleno extraordinario sobre el 'Estatut' que se celebrará hoy en la Cámara y el partido acabó en empate a cero. O peor aún, en derrota, porque el acuerdo tendrá que negociarse minutos antes del pleno de la Cámara catalana.

El abandono de Mas cuando aún no había acabado el encuentro hacía presagiar lo peor. Abandonó la reunión y dejó un mensaje: que los miembros del tripartito se pongan de acuerdo y luego le llamen, que la federación votará lo que el tripartito acuerde. Ahí está el problema, ya que las posiciones con las que llegaron los tres socios del 'Govern' eran muy lejanas. PSC e ICV coinciden en reclamar el cumplimiento del 'Estatut', la dignidad de Cataluña y apuestan por pasar a la acción política para rescatar la ley. ERC, en cambio, cree que el camino estatutario está agotado y debe abrirse el proceso hacia la independencia.

Tras la reunión, Puigcercós acusó a PSC y de CiU de actuar sólo pensando en el corto plazo. Según el líder de Esquerra, Mas pretende dejar en evidencia al tripartito y el PSC tiene poca prisa en llegar a un acuerdo porque no quiere que la resolución pueda llegar a tiempo a Madrid -el plazo para presentar las propuestas de resolución es las dos de la tarde del viernes- para evitarse el enfrentamiento con el PSOE. Desde el PSC, mientras, señalaron que «la unidad debe girar en torno al 'president'» y recriminaron a CiU su poco compromiso con el acuerdo y su actitud poco constructiva. «El pueblo habló el sábado y debemos escuchar al pueblo», dijeron los socialistas que confían en el consenso de última hora.