La ex contable de la heredera de L'Oreal corrige su acusación contra Sarkozy

El culebrón de L'Oréal dio ayer un respiro a Nicolas Sarkozy. Claire Thiboult, la antigua contable de la heredera del emporio cosmético, Liliane Bettencourt, retiró parte de las explosivas declaraciones que hizo el martes sobre la presunta financiación ilegal del presidente galo. Según el diario vespertino 'Le Monde', Thiboult dio «marcha atrás» y rectificó «parcialmente» ante los policías que la interrogaron.

Tras las controvertidas declaraciones que realizó en el sitio de Internet 'Mediapart', los investigadores volvieron para hacerle algunas preguntas. En ese segundo encuentro con los agentes, negó que Bettencourt entregara sobres con dinero al ahora jefe del Estado en los años 90, cuando era alcalde de Neuilly, ciudad donde reside la heredera de L'Óreal. También dudó en torno a fechas que había dado y arremetió contra el sitio web que la entrevistó, argumentando que sus palabras fueron tergiversadas y noveladas. Aunque sí mantiene que el gestor de la fortuna de la anciana le pidió 50.000 euros para Eric Woerth, ministro de Trabajo y tesorero del partido de Sarkozy.

Una fuente próxima al entorno del presidente francés citada por 'lefigaro.fr' opina que Thibout «ha sido manipulada totalmente por 'Mediapart'».

También se ha pronunciado la redacción de la página web, que defiende la seriedad de su trabajo al asegurar que el testimonio de Thibout se transcribió con precisión en el curso de dos conversaciones en las que había una tercera persona como testigo.

«Es una mujer que está totalmente aterrorizada», consideró Fabrice Lhomme, periodista de 'Mediapart' que recogió las declaraciones de la antigua contable.