El Príncipe entrega los Reales Despachos a los suboficiales en un emotivo acto en San Fernando
El jerezano Zorobabel Soto fue uno de los 176 condecorados, entre los que destacaron dos sargentos embarazadas
SAN FERNANDO. Actualizado: GuardarEs una tradición a la que nunca falta la Casa Real y ayer fue de nuevo el Príncipe de Asturias el encargado de presidir el acto de entrega de los Reales Despachos a los 176 sargentos de la 72 promoción de suboficiales, en una ceremonia celebrada en la plaza de armas de la Escuela de Suboficiales de la Armada.
Un acto que cada año simboliza, y cada vez con mayor fuerza, la integración de la mujer al ejército, tras ser regulado en el año 1988, si bien no fue hasta 1999 cuando se reguló la plena equiparación para hombres y mujeres, sin limitaciones de Cuerpos, Escalas ni de destinos operativos. Un largo y complicado camino que consiguió dar un nuevo paso en San Fernando al recoger dos damas alumnas embarazadas su Real Despacho uniformadas de acuerdo con su estado de gestación. De esta manera, se continúa rompiendo las barreras para que las mujeres avancen dentro de la carrera militar, sin que haya excusas de limitaciones físicas a la hora de realizar diferentes acciones o poder acceder a distintos cargos, compatibilizándolo a la vez su vida familiar, tal y como se demostró en un acto solemne en el que Don Felipe se llevó los mayores halagos y aplausos de los presentes.
Además, la sargento María Teresa Piñero se convirtió en la segunda mujer que este año consigue ser la número uno de su promoción en las academias militares. Nacida en Cartagena (Murcia) hace 34 años, está casada y tiene dos hijos. Ingresó en la Armada en 1998, y ha estado destinada en la Escuela de Transmisiones y Electrónica de la Armada, en la fragata 'Victoria' y en el Estado Mayor de la Flota. Por ello se le otorgó la Cruz al Mérito Naval, además de contar con una mención honorífica. «Han sido dos años de duro trabajo y creo que es el mejor premio a ese esfuerzo».
El jerezano Zorobabel Soto, también recibió tal distinción que se evidenció con la entrega de un sable por parte del presidente de la Diputación, Francisco González Cabaña. «Sin nuestros compañeros no hubiéramos podido llegar tan lejos y a ellos se lo quiero agradecer».
Al acto, también acudió la ministra de Defensa, Carme Chacón y el presidente de la Junta de Andalucía, José Antonio Griñán, para acompañar a Su Alteza durante este tradicional encuentro.