Wesley Sneijder sigue los pasos del mítico Johan Cruyff
Quizá no jugaría en la Holanda del 74 y del 78, pero el ex madridista camina con firmeza hacia el 'Balón de Oro'
JOHANNESBURGO (SUDÁFRICA).Actualizado:«Ni Messi, ni Rooney, ni Cristiano. La figura del Mundial será Wesley Sneijder». Ruud Gullit, estrella del mejor Milan de la historia y embajador de los Países Bajos para la candidatura del Mundial de 2018, anticipó antes del Mundial un pronóstico que provocaba hilaridad en otras leyendas neerlandesas como Cruyff, Koeman o su colega Van Basten, referentes que abominaron del método más resultadista que vistoso propuesto por el antihéroe Van Marwijk.
Seguramente, el juego y la presencia de Sneijder no le llegue ni a la suela de los talones a Cruyff, triple 'Balón de Oro' y poseedor de una elegancia y un cambio de ritmo extraordinarios; quizá Wesley no sería siquiera titular en aquella 'Naranja Mecánica' que implantó el 'fútbol total' y se quedó con la miel en los labios en los certámenes del 74 y el 78, de la mano de Rinus Michels y el austriaco Ernst Happel, respectivamente. Pero Sneijder acapara la atención del Grupo Técnico de Estudios de la FIFA, que podría distinguirle como mejor jugador del torneo y máximo goleador.
A un paso del éxito
«Estamos tan cerca... Lo más importante ahora es ganar el Mundial. No hay nada más grande que una Copa del Mundo y vivimos unas sensaciones tremendas, fantásticas. Tenemos cinco días para descansar, preparar bien la final y conquistarla», dispara, confiado, el centrocampista ofensivo del Inter de Milán, autor de cinco goles en Sudáfrica, incluido el doblete que eliminó a Brasil en cuartos de final y la diana que deshacía el empate ante Uruguay en la semifinal de Ciudad del Cabo. En cuatro de los seis encuentros disputados en este Mundial, todos saldados con victoria, fue designado el hombre más valioso del encuentro.
Nacidos en la misma academia del Ajax, Sneijder va tras los pasos de Johan Cruyff, ídolo de la 'Oranje' que lamenta ser un rey sin corona por no ganar un título mundial. El ex jugador Real Madrid, de 26 años, ha vivido una temporada de ensueño en San Siro, al conquistar tres títulos con el conjunto 'nerazzurro', y ahora busca del trébol de la suerte en el primer Mundial de la historia en África. Si salda la gran cuenta pendiente de Holanda, está llamado a heredar el galardón de Leo Messi, ahora unificado por la FIFA y la revista 'France Football', que le acredite como el actual número uno del planeta.