Es noticia:
ABCABC de SevillaLa Voz de CádizCádiz
Rafa Nadal levantó el pasado domingo en londres su octavo Grand Slam. :: AP
Deportes/Mas-Deportes

Nadal reafirma su número uno

Nunca antes un tenista español había logrado dos veces el `doblete mágico´: Roalnd Garros y Wimbledon en la misma temporada El manacorí aventaja en 3.840 puntos a Djokovic tras ganar en Wimbledon

EFE
LONDRES.Actualizado:

La segunda victoria de Rafael Nadal en Wimbledon confirmó que su primer éxito en el Gran Slam sobre hierba, en 2008, no fue algo fortuito y que el español está más que capacitado para ser el rey de cualquier superficie.

Fue un Wimbledon ordenado, sin alteraciones por la lluvia, pero con dos grandes sobresaltos por la temprana caída del seis veces campeón Federer y la celebración del partido más largo de la historia del tenis.

Una vez detenida la lucha del helvético, gracias a una victoria del checo Tomas Berdych en cuartos de final, se definió la figura del campeón. El camino de Nadal en busca del título se hizo llano sin la presencia de Federer en la competición británica.

A esas alturas Nadal había sacado ya la garra que se esperaba de él. El número uno necesitó una provocación de adversidad para ir creciendo paso a paso y ronda a ronda hasta exhibir su poderío e irrumpir como un verdadero campeón.

Unas molestias en la rodilla derecha le enturbiaron durante la primera y segunda ronda y tuvo que sudar más de lo esperado para quitarse de en medio al holandés Haase y al alemán Petzschner, respectivamente, y avanzar con dos costosas victorias.

Esos días el hombre de los «músculos de acero» aterrorizó a sus fieles seguidores con su baja forma y poco habituales desaciertos ante dos rivales que lo exprimieron hasta el quinto set.

Superados esos obstáculos, al tiempo que La Roja avanzaba en el Mundial de Sudáfrica, Nadal se encaraba hacia su octavo Gran Slam.

Así llegó el Nadal renovado, tras la ausencia de 2009, a alzarse como el primer español que logra por segunda vez el «doblete mágico»: Roland Garros y Wimbledon en la misma temporada.

Manolo Santana y Conchita Martínez consiguieron esa doble hazaña en 1966 y en 1994, respectivamente, pero no pudieron repetirla.Tras los golpes de Nadal quedaban el japonés Nishikori, el holandés Haase, el alemán Petzschner, el sueco Soderling, el británico Murray y el checo Berdych.

La huella española en Wimbledon se vio reforzada también por los méritos de David Ferrer, que combatió por primera vez desde 2006 hasta los octavos de final . El resto de la armada tropezó pronto, con ocho de ellos atascados en la primera ronda.