![](/cadiz/prensa/noticias/201007/06/fotos/2808765.jpg)
Los propietarios exigen que el PGOU permita legalizar parcelas de menos de 1.000 m2
Se trata de una de las alegaciones que presentará la oposición, como anunció ayer el ex edil de Urbanismo, José Pedro Butrón
Actualizado: GuardarParece un asunto muy técnico, pero no lo es. Tal cual se contempla en el actual Plan General de Ordenación, en el extrarradio de Chiclana sólo podrán regularizarse aquellas viviendas ubicadas en parcelas con una superficie igual o superior a los 1.000 metros cuadrados de superficie.
Esta Unidad Mínima, que es como se denomina el indicador del tamaño en cuestión, es el espacio mínimo que hace falta para construir una vivienda. Lo que ocurre es que en la localidad chiclanera podría resultar excesivo para un gran número de casas sin licencia repartidas por todo el municipio, con mayor incidencia en zonas muy pobladas de El Marquesado, Pago del Humo o Rana Verde.
Así lo consideran algunas formaciones políticas en la oposición. Quien más claro se ha pronunciado al respecto en los últimos días, ha sido el que fuera concejal de Urbanismo con el cuatripartito durante 17 meses, José Pedro Butrón.
Al frente de la coalición Unidos por Chiclana, Butrón advierte de que la elaboración del nuevo Plan General Municipal de Ordenación que se lleva a cabo en estos momentos, es una «oportunidad única» para poner fin a esta situación y a los agravios comparativos que crea.
El edil que fuera portavoz y candidato por IU en la localidad, adelantó ayer que entre las alegaciones que presentará a este documento estará, precisamente, que en las denominadas Áreas de Gestión Básica a legalizar puedan incluirse esas parcelas de menor tamaño.
«Desde años venimos diciendo que la realidad supera al PGMO en cuanto a número de viviendas existentes y tamaño de las parcelas que ya existen. Los tres planes anteriores, además de ilegales, no contemplaban esa realidad, sino que mantenían unas parcelas mínimas que casi nadie tenía en muchas zonas de la ciudad», explica Butrón.
Ese mismo argumento ha sido utilizado por distintos colectivos de propietarios siempre que se ha hablado en los últimos años de legalización masiva de inmuebles edificados al margen de la legalidad.
La Federación de AA VV Pagumo, una de las más importantes de la ciudad en cuanto a número e incidencia en el proceso de legalización, ya avanzaba hace meses «la necesidad de que la parcela mínima para legalizar sea menor».
A su entender, muy pocos propietarios de viviendas sin licencia en Chiclana tienen parcelas de 1.000 m2, «y una gran mayoría son menores y, por tanto, no podrán regularizarse en su momento», aseguran. Para los afectados, ha sido un error de bulto mantener durante 10 años la parcela mínima en 2.000 m2, como se recogía en los anteriores planes generales de ordenación.
La reducción de la parcela mínima tendría además consecuencias positivas también para los propietarios, ya que el pago de los costes de la dotación de servicios se repartiría entre un mayor número de inmuebles. Si se reduce la exigencia del tamaño, numerosas parcelas no segregadas legalmente evitarán quedarse fuera de ordenación tolerada, y podrán ser legales.
La plataforma de Vecinos Afectados por la Regularización se ha sumado en sus meses de negociaciones con el Ayuntamiento a este planteamiento. Ahora solo falta que Urbanismo les haga caso en el nuevo planeamiento.