Se ahorca en Alcalá de los Gazules tres días después de su detención por malos tratos

La amenaza que durante dos años inquietó a su pareja sentimental terminó por cumplirla, cerrando de forma trágica y definitiva una historia tormentosa. Un hombre de 39 años se quitó la vida el sábado en Alcalá de los Gazules, tres días después de haber sido detenido por malos tratos psicológicos. Dejó una nota manuscrita en donde explicaba los motivos. El argumento pasional le llevó a tomar tal drástica decisión.

Su pareja le denunció el pasado miércoles en el cuartel de la Guardia Civil. Aseguró a los agentes que llevaba dos años sufriendo malos tratos psicológicos, vejaciones y las continuas amenazas de suicidio si rompía con la relación. En su denuncia no incluía ningún episodio de violencia física.

Los agentes, con la declaración de la mujer en la mano, procedieron a detener a Sergio M. C., quien quedó en libertad con cargos tras pasar a disposición judicial. La supuesta víctima también indicó que llevaba mucho tiempo bajo tratamiento psiquiátrico por culpa del tipo de relación que mantenía.

Una nota manuscrita

El detenido regresó a su casa y el pasado sábado decidía ahorcarse. Por la tarde, la Guardia Civil recibía el aviso del suicidio y sólo pudo certificar la muerte del individuo. Los agentes no necesitaron realizar una investigación profunda para determinar las causas del suicidio. Encima de una mesita encontraron una nota manuscrita. El fallecido confirmaba así que la muerte había sido voluntaria y que había tomado esa decisión por la ruptura con su pareja.

Las amenazas y las vejaciones son un tipo habitual dentro de la violencia de género. Sin embargo no suele salir a la luz, salvo cuando va acompañada de agresiones. La falta de pruebas y el temor a represalias son algunas de las circunstancias que llevan a muchas víctimas a no denunciar.