Imparable China
Actualizado:China acaba de revisar al alza los datos macroeconómicos del año pasado, cuando el mundo se encontraba en recesión, de modo que el crecimiento que se creyó del 8,7% del PIB fue realmente del 9,1%. Este incremento acentuará sin embargo la leve tendencia a la baja que se prevé para el año en curso, aunque el adelanto del propio Gobierno sobre el primer trimestre avanza un crecimiento del 11,9%. En China, la recesión ha sido combatida por medios keynesianos: se aplicó un programa de estímulos a la economía de cuatro billones de yuanes (586.000 millones de dólares), que, al llegar a su término, puede arrojar un resultado para 2010 peor de lo esperado. De cualquier modo, son cifras asombrosas. La que ya es la tercera economía del mundo avanza a pasos agigantados hacia el liderazgo exportador, sin que su desarrollo espectacular converja con la modernización y democratización políticas, y sin que haya cesado el manifiesto 'dumping' social provocado por la falta de derechos laborales. Esta situación es alarmante, aunque muchos piensen que quienes han sido capaces de generar el boom económico sabrán patrocinar también la transición hacia la democracia y las libertades.