«El mejor Plan E sería que el Gobierno pagara lo que le debe a las empresas»

Desde que el Gobierno presentó su primer borrador de reforma laboral tiene la impresión de que se ha perdido una gran oportunidad. El presidente de la Confederación de Empresarios reconoce que la situación sigue siendo crítica e invita a seguir invirtiendo en esfuerzo para salir adelante. Confía en que el turismo se mantenga a flote y tire de la economía gaditana, al menos mientras dure el verano. De momento, resulta complicado hacer previsiones de futuro.

-Aunque las medidas no han sido las deseadas, ¿se puede esperar algún tipo de cambio a corto plazo en el mercado laboral?

-La reforma laboral que ha habido es muy 'light'. No va a solucionar el desempleo, de hecho las previsiones dicen que seguirá subiendo el paro. No vamos a crear empleo hasta que nuestro PIB crezca por encima del 2% y el año que viene a duras penas llegaremos al 0,5%. La rigidez normativa es mucha y la empresa no se atreve a contratar.

-Pero esta reforma sí ha abaratado el despido...

-Muy poco para lo que requiere la situación. Además, ha subido las indemnizaciones por finalización de contrato temporal y ahí sí ha dado un buen mazazo a las empresas. En nuestra provincia son muy importantes los contratos de verano y en este caso se ha penalizado el empleo. Hay otros temas en los que no se ha entrado mucho más importantes como los convenios colectivos, la ley de huelga, la bajada de las cotizaciones a la Seguridad Social, que son cinco punto más altas que en el resto de Europa. Y no se han definido los motivos del despido administrativo, que se siguen dejando a criterio de los jueces.

-Además del paro, la provincia se enfrenta además a una crisis en la industria naval. ¿La situación es realmente crítica?

-El sector industrial en general está sufriendo bastante. El otro día presentábamos el informe de las empresas del Campo de Gibraltar y el volumen de negocio había descendido casi un 30%. En el naval falta carga de trabajo y los trabajadores exigen más encargos. Airbus también está un poco en el aire porque el 'tijeretazo' está afectando a los pedidos militares. Sin embargo, los grandes contratos que vienen de países como China llegan con la condición de que se instalen plantas allí. Ellos también quieren aprender a hacer aviones y no se extrañe que cuando sepan hacerlos nos empiecen a vender ellos a nosotros.

-¿Qué impacto cree que tendrán los recortes en la provincia?

-Un impacto terrible. Cuando salieron los presupuestos de este año ya dijimos que eran cortitos porque no había un equilibrio en lo social y lo económico. No hay que retroceder un paso en lo social, pero lo económico nos hace andar hacia delante. Entonces se nos garantizó que para el puente no iba a faltar dinero ni para la línea de alta velocidad Sevilla-Cádiz y nos conformamos con lo que estaba proyectado. Ahora sabemos también que también les meterán la tijera. Se proponen iniciativas, llámelas E, Proteja, etcétera, pero el mejor Plan E que se podía hacer es que las administraciones paguen lo que le deben a las empresas.

-¿Cree que el turismo aguantará para seguir tirando de la economía gaditana?

-Bueno, el sector confía en tener unos resultados parecidos a los del año pasado, pero nos dicen muchos touroperadores y hoteles que para ser competitivos han tenido que bajar los precios y sacar ofertas más baratas. En otros mercados tenemos que competir contra destinos como Turquía o Túnez, ahora de muy de moda, que ofrecen tarifas muy por debajo. En nuestra provincia tenemos grupos empresariales de otras comunidades y países y sus centros de decisión no están aquí. Aunque el sector no quiera entrar en la guerra de precios, al final se han tenido que meter para mantener el volumen de negocio y eso se ha visto desde esta Semana Santa.