La Junta impulsa ahora la creación de campos de golf tras el frenazo en el sector
La Administración reduce los trámites que aprobó en 2008 y que supusieron un parón en la puesta en marcha de nuevas instalaciones
CÁDIZ. Actualizado: GuardarEl cuento ha cambiado tanto en los últimos cuatro años que la Junta ha tenido que modificar el guión para adaptarse a las nuevas circunstancias del mercado inmobiliario y turístico. Cuando la administración andaluza aprobó el famoso Decreto de Campos de Golf en 2008 quiso regular un sector que había crecido sin control y que había dado como resultado que algunas instalaciones deportivas fueran sólo el pretexto para construir viviendas en zonas no urbanizables. Cuando por fin se aprobó la norma, en la que se establecía la posibilidad de abrir campos de golf si eran de excelencia, se incluyó la figura de interés turístico. Este marchamo de calidad lo recibirán las instalaciones que aportan valor añadido a la oferta andaluza y pueden albergar usos urbanísticos. Entre otros requisitos, deben tener una superficie de al menos 70 hectáreas, con 18 hoyos y una longitud de recorrido de 6.000 metros, así como incorporar medidas adicionales de sostenibilidad ambiental y acreditar distintas certificaciones de calidad.
Al poco tiempo la Junta modificó el primer texto porque el papeleo era asfixiante incluso para los buenos proyectos. Y ayer mismo, el Consejo de Gobierno de la Junta aprobó un nuevo decreto en el que se facilitan los trámites burocráticos. La filosofía con la que nació la figura de campos de golf de interés turístico se mantiene, pero ahora la Administración allana el camino para los escasos inversores que aún se atrevan a plantear una de estas instalaciones, teniendo en cuenta que ya no pueden ser pretexto para una operación inmobiliaria descontrolada y que la demanda de juego ha caído mucho debido a la fuerte crisis económica internacional.
Medidas adoptadas
Entre las medidas que se aprobaron ayer se encuentra la eliminación de la obligatoriedad de que los proyectos de nuevos campos de golf que opten a la declaración de Interés Turístico estén contemplados previamente en los planes subregionales de ordenación del territorio (POT). A partir de ahora los usos complementarios serán definidos en la propia declaración de interés turístico, que debe mantener las garantías correspondientes en cuanto a ordenación y planificación urbanística. Según el consejero de Turismo, Comercio y Deporte, Luciano Alonso, al no tener que estar incluidos en los POT, se contribuye a eliminar el déficit territorial existente en este momento en relación con la presencia en la comunidad. Alonso destacó que el objetivo es que haya cierto equilibrio territorial en materia de campos de golf, concentrados actualmente en las zonas del litoral gaditano y malagueño, y «que lleguen también al interior de Andalucía». También se agilizan los trámites para conseguir la autorización de calidad ambiental, que queda pospuesta al momento de la declaración de Interés Turístico. Así se evita que el promotor del proyecto soporte un coste temporal y económico antes de conseguir este sello de calidad. En todo caso, durante la tramitación previa será necesario superar el requisito del informe ambiental favorable. Los proyectos que ya hayan iniciado los trámites con anterioridad a este decreto podrán acogerse a la nueva regulación si el promotor lo solicita.
Entre otros cambios incluidos en este nuevo decreto, aprobado ayer y aún sin publicar en Boja, se incluye una mejora para los ya construidos. Según el decreto de 2008, los campos de golf ya en funcionamiento tenían un plazo de dos años para adaptarse a la normativa de calidad que, a groso modo, hacía referencia al uso de agua especial para riego (no potable ni de acuíferos) y a las distancias mínimas entre calles y medidas de los recorridos de golf. A partir de este decreto, los viejos campos tienen cuatro años para adaptarse «respecto de aquellas características e instalaciones en que por su naturaleza sea posible».