Historia. Distintas imágenes de un año histórico en el Xerez con la alegría del ascenso y la desilusión del descenso. :: LA VOZ
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365 días después de la gloria

Hoy se cumple un año del histórico ascenso del Xerez a Primera División en ChapínUna época salpicada por la llegada de tres entrenadores, un concurso acreedor, una venta del club y un futuro incierto

JEREZ. Actualizado: Guardar
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El Xerez Club Deportivo está de aniversario. Hoy se cumple un año del histórico ascenso a Primera División tras 62 años de larga espera, sufrimiento y agonía. 365 días después, la situación del conjunto azulino ha dado un giro radical; ha vuelto a dar con los huesos en la división de plata tras llegar con vida hasta la última jornada en la Liga de las Estrellas, la entidad está totalmente paralizada a fecha de hoy, sin presidente y sin consejo de administración, con sólo tres jugadores en la plantilla con contrato, sin entrenador, esperando la marcha de Antonio Fernández Monterrubio, Miguel Ángel Rondán, Antonio Poyatos y Jacobo Moreno y acogido a un concurso de acreedores que espera la intervención judicial la próxima semana.

Un panorama muy distinto a la gran fiesta que se vivió, primero, en el Municipal de Chapín tras la victoria ante el Huesca y que daba de forma matemática el ascenso a Primera y, después, por todas las calles de la ciudad que se tiñeron del color azulino hace hoy justo un año.

El 13 de junio de 2009 es ya una fecha marcada con letras de oro en todo el xerecismo. Un salto de categoría que se consiguió con mucho trabajo, esfuerzo e ilusión, después de lograr, un año antes, la salvación del descenso a Segunda División B. Dos hombres importantes en la historia del Xerez lograban con sus goles la gesta. Vicente Moreno y Carlos Calvo marcaban en un partido de emociones y se adelantaban a la gran fiesta azulina que más tarde saldría en masa para celebrar un hito histórico en la entidad y en la ciudad.

Sin embargo, aquellos días de fiesta, alegría y felicitaciones no hicieron olvidar, ni tan siquiera cambiar, el destino del deportivo fuera de los terrenos de juego.

Mientras tanto, el por entonces máximo accionista, Joaquín Morales, se dejaba ver por Chapín y el vestuario para celebrar con los jugadores y el cuerpo técnico el tan ansiado ascenso. Tras el baño de multitudes con los azulinos y por las calles de la ciudad, las visitas al Ayuntamiento, la Diputación de Cádiz o la ofrenda a la Patrona de Jerez, llegaba el momento de trabajar en la planificación de una ilusionante temporada.

Primeros problemas

Muchos jugadores seguían con contrato en vigor, especialmente los héroes de la salvación, primero, y los del ascenso, después, pero no todo iba a ser un camino de rosas en el Xerez y los primeros problemas aparecían. La relación entre Joaquín Morales y el técnico Esteban Vigo, que terminaba contrato, no eran las mejores y tras un tira y afloja entre ambos, el entrenador malagueño anunciaba su marcha y su fichaje por el Hércules. Uno de los pilares del milagro se derrumbaba y con ello la ilusión de muchos xerecistas. Había que buscar entrenador y no uno cualquiera. Se necesitaba enganchar a la afición que volvió a declarar la guerra al de Dos Hermanas y que ya pedía la marcha del director general.

Debut en Primera

Por su parte, el director deportivo, Miguel Ángel Rondán, lidiaba con los problemas pero con el paso de las semanas lograba armar un equipo competitivo a base, principalmente, de cesiones debido al escaso presupuesto con el que se decidió apostar para competir por primera vez con los mejores. Y la jugada le salió bien a medias, ya que acertó en las incorporaciones pero no fracasó la contratación de Ziganda. Y pese a todo, los líos extradeportivos no dejaban de llegar. Por enésima vez salía el tema de la compra venta del club. En esta ocasión era Fernando Rodríguez, propietario de la empresa de transportes STX Global Services el interesado en hacerse con las acciones del Xerez, pero el acuerdo con Joaquín Morales no llegó a cuajar. Esta vez no importaba mucho el deseo del nazareno de marcharse, porque se pensaba más en el debut en Primera que en otra cosa.

El 30 de agosto de 2009 es otra fecha para enmarcar en la historia del Deportivo. Los azulinos se estrenaban en Liga ante el Mallorca, y pese a que se jugó bien, la primera derrota llegó. Así durante buena parte del primer tramo de la competición, ya que el equipo no ganaba, sólo una victoria en 19 jornadas, y se empezaba a meter de forma peligrosa en la última posición. Cuco Ziganda no cuajó en el equipo y los malos resultados, sólo siete puntos con él en el banquillo, precipitaron su destitución.

Su salida coincidía con un nuevo proceso de venta que en esta ocasión sí se llevó a cabo (meses después ha resultado ser un fracaso) y de la mano de los argentinos llegó Néstor Gorosito. La nueva esperanza azulina supo adaptarse a una ciudad y a un equipo que volvía a recuperar la esperanza y que muy cerca estuvo de obrar el milagro de la permanencia. La temporada en Primera terminaba y el Xerez llegó vivo a la última jornada ante el Osasuna. Debía ganar y esperar unos resultados a su favor. Pese a todo, el sueño y la gran temporada en Primera División ya era una realidad en la historia del Deportivo. Tras el pitido final, los azulinos no pasaban del empate a uno ante los navarros y el golpe nos hacia despertar del sueño de la permanencia.

Antes, Pipo y sus futbolistas habían hecho creer en ese sueño a base de victorias, como la que se consiguió en el Vicente Calderón o en casa con rivales directos como el Málaga, el Zaragoza o el Almería. Dos caras en una temporada histórica que han permitido al Deportivo ser uno de los conjuntos más queridos en el panorama nacional. También quedará en el recuerdo de muchos xerecistas los partidos ante el Real Madrid en el Bernabéu o ante el Barcelona en el Camp Nou, pasando por Mestalla o La Catedral.

Un año de mucho mérito en los terrenos de juego, pero empañado por la mala imagen en los despachos y por la mala gestión de los dirigentes azulinos.

Futuro incierto

En definitiva, un año de ilusiones, esperanzas y también de muchos desengaños. 365 días que han dado para mucho y que a día de hoy, dejan abierta la incertidumbre en el club de cara al futuro. Y es que antes de la histórica fecha que el xerecismo celebra hoy, el todavía presidente de la entidad, Federico Souza, presentaba su dimisión como consejero del Xerez y decidía abandonar la nave azulina presentando su dimisión. Un vacío de poder que a día de hoy sigue siendo una realidad y que parece que esta semana tomará una dirección diferente.

El club será intervenido judicialmente tras la petición por parte de los administradores concursales a la jueza Nuria Orellana para dejar sin funciones a los miembros del consejo de administración y tomar ellos, Jesús Rodríguez, Antonio Del Puerto y José Luis Sierra, plenos poderes en el Xerez.

Ahora empieza un nuevo ciclo. Esperemos que dentro de 365 días tengamos que hablar de la historia y de otro gran ascenso a Primera.