Tensión y nervios en una tarde de auténtico infarto

Tarde de transistores, nervios a flor de piel y emoción, mucha emoción. Así se presenta la penúltima jornada de la Liga Adelante. Al fin y al cabo, la ocasión lo merece, ya que el sueño del ascenso y el temor por no bajar de categoría hacen acto de presencia en la decena de encuentros previstos para un día de auténtico infarto.

La visita del Cádiz a El Alcoraz será un claro ejemplo de una cruenta batalla por evitar la caída a las 'catacumbas'. Ahora bien, oscenses y gaditanos no quitarán el ojo de otros duelos vitales de cara al futuro de la zona baja. Por ejemplo, el Albacete, que parece haber sufrido un importante retroceso en las dos últimas jornadas, no puede volver a tropezar en su feudo (ya lo hizo la semana pasada frente al Recreativo) ante un Girona que tiene prácticamente atada su continuidad una temporada más en la categoría de plata. En otras palabras: los discípulos de David Vidal deben ganar 'por lo civil o por lo criminal', máxime si se tiene en cuenta que el Cartagena, que puede llegar con opciones de ascenso a la última jornada, recibe a los manchegos en su terreno en el último choque de este curso.

También saltarán chispas en La Nueva Condomina. Allí, un Murcia al alza recibe a otro rival directo en su intento por permanecer en Segunda. Los 'pimentoneros', que acumulan dos victorias consecutivas tras su tropiezo en Carranza, se la juegan ante Las Palmas. Los grancanarios no terminan de librarse de la quema y si caen Murcia se verán abocados a jugarse el todo por el todo la semana que viene.

El Nuevo Arcángel de Córdoba también sera testigo de otra vibrante contienda. Los blanquiverdes se relajaron en exceso y todavía no han firmado su billete de permanencia. Tanta tranquilidad ha desembocado en nerviosismo y ahora no pueden fallar ante un rival que, de ganar en tierras andaluzas, empataría a puntos con los hombres de Lucas Alcaraz en la clasificación. Algo impensable hace no demasiadas semanas. Y es que, el Real Unión se resiste a abandonar la categoría tras décadas de ausencia. Como muestra un botón: el domingo pasado se deshicieron en el Stadium Gal del Levante.

Por otro lado, la historia del Nástic recuerda, en cierta manera, a la del Córdoba. Los tarraconenses están a dos puntos del pozo y, para colmo, no pueden tropezar en el Nou Estadi. Paradójicamente, su propio feudo es su 'estadio maldito' durante este curso. Eso sí, para alivio del Nástic, el adversario es un Elche que nada busca en el envite.

Duro hueso para los 'charros'

Una de las citas más esperadas del día es la que llevarán a cabo Salamanca y Betis en El Helmántico. Los 'charros' están obligados a sumar en su casa para no caer de nuevo al fondo de la tabla. La misión no es nada fácil, ya que tendrá que medir su potencial ante un Betis que depende de sí mismo para retornar a Primera. A fin de cuentas, una oportunidad de oro para los de Heliópolis, que podrían incluso ascender en Salamanca o, por el contrario, abandonar la zona de prestigio a falta de una jornada. Casualidades del destino.

El Levante es otro de los implicados en el ascenso. Los 'granotas' no quieren que el descendido Castellón sea un 'bombón envenenado' y afrontarán la cita con un objetivo: vencer para dejar casi sentenciado (o finiquitado por completo) su ascenso. Ahora bien, aún cumpliendo ante el 'colista', los valencianos podrían tener que vivir un duelo a vida o muerte en Sevilla ante el Betis.

Cartagena y Hércules cuentan, a priori, con dos duelos no demasiado complicados. Ambos parten con desventaja en su carrera por subir a la 'Liga de las Estrellas', pero los blanquinegros viajan a terreno de un salvado Recre y los blanquiazules reciben en el Rico Pérez a un Rayo que llega más aliviado.

La fiesta se espera en Anoeta. Salvo sorpresa mayúscula, la histórica Real Sociedad certificará a las 19.45 horas su vuelta a Primera.